El Día Internacional de la Mujer y la Violencia de Género

Desde hace casi 100 años, cada 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer, con diversos actos, eventos, proclamas y marchas y amplia cobertura en los medios de comunicación en programas donde se discute el rol de la mujer en la sociedad actual. El objetivo es analizar y señalar los avances o retrocesos que se vienen obteniendo en la lucha de la mujer por su participación en la igualdad con el hombre y la defensa de sus derechos a los que todos los seres humanos, sin importar sexo o condición, tenemos (y valga la redundancia), derecho.

Las opiniones que contiene este artículo, no tienen una connotación feminista, como no lo es tampoco el Día Internacional de la Mujer, que solo pretende ser una jornada de reflexión donde discutir y analizar entre otras cosas, los mecanismos y medidas que -en diferentes ámbitos-, pueden (o deben) adoptarse para favorecer el fin de la violencia de género, familiar, social, laboral y educativa en contra de la mujer.

Las diferentes costumbres de diversas culturas en muchos países del mundo, favorecen, estimulan e incluso premian, el machismo y la violencia contra las mujeres situaciones que sin duda, favorecen la aparición de las condiciones denigrantes de vida, trabajo y la falta de oportunidades, propiciando de esta manera, la desigualdad laboral que desde siempre, padece la mujer.

A lo largo de todo el siglo XX y como resultado de una lucha constante y tenaz, la mujer ha ido conquistando parcelas tales como el derecho a voto y los derechos laborales aunque en éste último campo falta aún, mucho por hacer ya que existen todavía sectores y parcelas laborales donde la mujer –además de demostrar su capacidad como trabajadora-, debe luchar por el respeto a su condición de mujer, el derecho a no ser abusada o no ser víctima de acoso laboral, sexual o de violencia de género y, contrariamente a lo que se piensa, las mujeres deben librar esta lucha tanto en países en vías de desarrollo como en los países adelantados como los europeos donde se registra violencia contra la mujer en mucho mayor proporción que la conocida y respecto de la violencia de género, Amnistía Internacional señaló que en Suecia, sólo el 12% de las victimas de violencia de género denuncian a su agresor y terminan en juicio. En Dinamarca, el sexo sin consentimiento en el matrimonio no esta penado; en Francia una mujer muere cada tres días a manos de su pareja y en España, las culpables de violencia de género entre los residentes en situación irregular, se enfrentan a la posibilidad de expulsión del país si son denunciados por su víctima.

En la Unión Europea (UE), decenas de miles de mujeres y niñas de todas las edades y de todos los grupos sociales son victimas de múltiples formas de violencia, y aun así sigue estando oculta para la mayoría de la sociedad porque en muchos países, no se registran informes sobre éstas prácticas de violencia ni en comisarías ni juzgados y tampoco existen políticas comunes para combatir este tipo de violencia y…¡¡¡estamos en Europa, en el “primer mundo”!!!

Con mucha tristeza e indignación se puede constatar que en muchos países –pese a los avances en el campo de la educación-, se sigue permitiendo que mujeres y niñas sean discriminadas y marginadas, obligándolas a matrimonios forzados a edades tempranas, a la mutilación genital, a la condición de esclavas sexuales. En suma, la violencia ejercida contra las mujeres hoy, como hace mucho tiempo.

Con esto quiero señalar que lejos de disminuir los riesgos y exigencias a los que la mujer se enfrenta cada día, sigue instalada en la sociedad la desigualdad y la violación de los derechos humanos de las mujeres y por eso, es de gran importancia conmemorar jornadas como las del Día Internacional de la Mujer para lograr que un futuro próximo igualitario, sea posible para todos y que la discriminación y la pobreza, no tengan cara de mujer.

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El Día Internacional de la Mujer Trabajadora (o también Día Internacional de la Mujer) se celebra el día 8 de marzo y está reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En este día se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo integral como persona. Es fiesta nacional en algunos países.

La idea de un día internacional de la mujer surgió al final del siglo XIX, en plena revolución industrial y durante el auge del movimiento obrero. La celebración recoge una lucha ya emprendida en la antigua Grecia y reflejada por Aristófanes en su obra Lisístrata, que cuenta como Lisístrata empezó una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la guerra, y que se vio reflejada en la Revolución francesa: las mujeres parisienses, que pedían "libertad, igualdad y fraternidad", marcharon hacia Versalles para exigir el sufragio femenino, pero no fue sino hasta los primeros años del siglo XX cuando se comenzó a proclamar, desde diferentes organizaciones internacionales de izquierda, la celebración de una jornada de lucha específica para la mujer y sus derechos

Origen de la celebración: Dinamarca
Día de celebración: 8 de marzo
Celebrado desde marzo de 1911