Entre los retratos, todos ellos de mujeres, se encuentra personajes del mundo de la cultura, como cantantes o pintoras, y damas de saciedad. Muy graciosos los retratos de la chanchonière, Edith Piaf o el de la pintora mexicana Frida Khalo.
Pintura coloristas e ingenuista de quien no se propone o pretende hacer pintura académica. El arte naif suele surgir en muchos de sus autores, cuando dejan de trabajar en su profesión habitual o se jubilan. Pintar resulta absorbente y relajante en estas ocasiones y parece ser el caso de Carmen Resino, que combina su labor de escritora con la de pintora desde 2007.
La mayoría de sus cuadros son de mediano formato.
Carmen Resino es licenciada en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y ha sido galardonada con diversos premios y menciones de honor. Fue miembro fundador y presidenta de la Asociación de Dramaturgas Españolas y perteneció a la junta directiva de la Asociación de Autores de Teatro.
El académico Lázaro Carreter dijo de ella: “Carmen Resino tiene un talento poco común y es una considerable autora de teatro”. Por otra parte, Virtudes Serrano la considera “una de las autoras más prolíficas y de mayor enjundia del actual panorama del teatro español”.
Entre sus obras publicadas o estrenadas se encuentran: El Presidente, Cero, Colisión, La sed, ¡Dinero, dinero, dinero!, Ultimar detalles, Ulises no vuelve, Auditorio, La bella Margarita, Pop y patatas fritas, Bajo sospecha y otras.