Mujer inquieta y solidaria con las inquietudes sociales antes los grandes problemas de la sociedad, la pintora presenta un busto maniquí con pequeños papeles pegados con reclamaciones e invectivas contra la situación de la política, de la economía y de la ciudadanía.
La exposición muestra también una serie de dibujos coloreados en los que la autora revela gestos o posiciones de escritores, pintores, filósofos y otros personajes a los que se observa en las tardes de cultura de la capital de España como Javier Sádava, Ana Rossetti, Dulce Chacón (ya desaparecida), etc.
Carmen Pagés, licenciada en Bellas Artes, es una buena colorista y se siente a gusto en el pequeño formato, capaz de transmitir con más cercanía la pintura. Los títulos son con frecuencia irónicos, sobre todo en las obras relativas al mar y un barco de papel que tocado naufraga.
Muy bello un políptico de papel con ramajes y flores en fondos amarillos, de gran luminosidad.
Carmen Pagés está casada con el académico de número de la Real Academia de San Fernando. Tienen dos hijos.
(150).jpg "Carmen Pagés expone su visión de los placeres cotidianos en Pintura")
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