Marina Oroza (Madrid, 1960), licenciada en Magisterio por la Universidad de Barcelona, es una gran performer al igual que su padre a la hora de leer o interpretar sus versos. Sus libros conllevan títulos sugerentes como La chimenea de Duchamp (2014), Así quiero morir un día (2005) y Pulso de vientos (1997). Sus actuaciones en universidades, teatros, fundaciones y museos. La oralidad es parte integrante de su poesía.
Su libro Esto es real se abre con una cita del escritor portugués Fernando Pessoa en su poema “El Guardador de Rebaños”: “No tengo filosofía, tengo sentidos… Si hablo de la Naturaleza no es porque sepa qué es sino que la amo, y la amo por eso, porque quien ama nunca sabe lo que ama, ni sabe porque ama, ni qué es amar… Amar es la eterna inocencia, y la única inocencia, no pensar”.
Marina Oroza por su parte nos habla así en su poema “Una caja de zapatos”: “De niña hice tres preguntas,/ madre, ¿qué es existir? ¿qué es lo que es verdad? y también ¿qué es la nada?/ Cuando el abuelo murió, madre dijo que seguiría/ viviendo dentro de mí.”
Otro de los bellos poemas de Marina Oroza es el titulado “El mar”: “El mar delante/el aire cicatriza! la piel detrás”.
Al saber que la autora es una buena performar, que laoralidad es parte de su actividad creadora, lee y escucha los poemas con esa atención: “No acaban nunca las olas/ de borrar el horizonte,/ los vapores del tiempo/muriendo en nuestro brazos./ Tan cerca está la alegría/ de volver a encontrarnos.”