Es importante hidratar las manos y uñas para evitar que se quiebren con facilidad y se agrieten. El consumo de calcio, el uso de cremas para manos y uñas y un manicura semanal pueden ser de gran ayuda. Existen acondicionadores de uñas que a través de sus ingredientes (baya natural) o vitamina E permiten el endurecimiento de éstas.
Como decíamos, existen algunos trucos caseros:
Para hidratar las uñas remójelas en una taza con aceite de oliva durante 15 minutos todas las noches antes de acostarse. Enjugue con agua antes de dormir, es recomendable no secarlas para dejar una fina película que actuará durante la noche.
Para fortalecer las uñas quebradizas y sin brillo haga una infusión de cola de caballo - se consigue fácilmente en las herboristerías o farmacias-. Una vez tibia sumerja las uñas durante 5 minutos. Es recomendable repetir esta operación 3 veces a la semana preparando una infusión nueva. La cola de caballo es excelente porque contiene mucho sílice que fortalece las uñas.
Para suavizar la cutícula, masajee con aceite de ricino que evita que se resequen y se partan, el aceite de ricino es rico en vitamina E que es fundamental para la nutrición de las uñas y la cutícula. Si prefiere, el uso de productos con aceite de oliva, almendras dulces, zumo de tomates y pepinos son excelentes.
Mantenga protegidas las uñas de las agresiones del medio ambiente con brillo o esmalte.