Cuando fue publicado, el pasado domingo, no se tenía mayores certezas de cuándo había sucedido y de quiénes estaban involucrados. Pero, 24 horas después, la Policía marroquí aseguró que había capturado a seis jóvenes entre los 15 y los 17 años, provenientes del barrio de Mâaguiz à Bernoussi, señalados de haber participado en el hecho. La joven fue identificada como una mujer de 24 años con problemas mentales.
Pero, a pesar de las capturas, aún no hay consenso de cuándo se presentaron los hechos. Mientras que voceros de la empresa de buses M’dina Bus aseguraron que se dio el pasado viernes, la Policía aseveró que esta se remontaría a tres meses atrás. Aun así, sí coinciden en que no se recibió denuncia ni de la mujer ni del conductor del autobús.
Sobre la falta de acción por parte del conductor, la empresa propietaria del vehículo dijo, según recogió el diario El País, que “la duración del vídeo es muy limitada, apenas llega al minuto. Al principio, la chica no grita de forma alarmante. Un conductor no puede percatarse necesariamente de que hay un problema, el ruido en un autobús forma parte de lo cotidiano”.
Aun así, las explicaciones no han frenado las críticas en contra del desdén y de la falta de atención, no solo del conductor, sino de los demás pasajeros que vieron cómo los jóvenes en grupo abusaban de la mujer y, a pesar de eso, no hicieron nada para frenarlo.