Breivik declara que su matanza fue un acto "de bondad" y volvería a hacerlo

El ultraderechista Anders Behring Breivik comparó hoy a los miembros de las Juventudes Laboristas que ejecutó a sangre fría el pasado 22 de julio en la isla noruega de Utøya con las Juventudes Hitlerianas y afirmó que, de poder, repetiría los atentados. Duración: 1,13

El ultraderechista noruego Anders Breivik, autor confeso de la muerte de 77 personas en Oslo y en la isla de Utoya, ha declarado ante el tribunal que la doble matanza, perpetrada el pasado mes de julio, se ha declarado no culpable con el argumento de que actuó para defender a su país contra el multiculturalismo en el espacio de una hora en su primera comparecencia ante el tribunal. 
Breivik, quien intervendrá ante la sala a lo largo de los próximos cinco días, ha leído íntegramente su declaración a pesar de que los jueces le requirieron en varias ocasiones que interrumpiera la lectura. Las víctimas han lamentado que se le haya permitido utilizar el juicio para hacer propaganda en favor de la violencia.
"La matanza fue un acto de bondad"
En su texto, leído en un tono monóntono y sin emoción, Breivik invocó a los guerreros indios estadounidenses, como 'Toro Sentado', para arremeter contra el Islam y el "infierno" multicultural y advirtió de que Europa sufrirá "ríos de sangre".

"Los ataques del 22 de julio fueron ataques preventivos para defender al pueblo noruego y a la etnia noruega", aseveró. "Sí, volvería a hacerlo otra vez", prosiguió. La matanza, añadió, fue un acto "de bondad, no de maldad".

En la reanudación de la vista, Breivik ha declarado ante el tribunal que la doble matanza, perpetrada el pasado mes de julio, fue el "ataque político más sofisticado y espectacular cometido en Europa desde la II Guerra Mundial".
"He llevado a cabo el ataque político más sofisticado y espectacular que se haya cometido en Europa desde la II Guerra Mundial", manifestó, en una declaración escrita y leída por él mismo en su primera comparecencia ante el tribunal.
En caso de ser declarado culpable y dueño de sus actos, Breivik sería condenado a un máximo de 21 años de cárcel, aunque la pena podría prolongarse indefinidamente si se le considerase un peligro permanente. En caso de que se le diagnosticasen problemas mentales, podría ser ingresado indefinidamente en una institución psiquiátrica con revisiones periódicas. 
Uno de los jueces recusados por pedir "pena de muerte"

El tribunal que juzga al asesino noruego Anders Behring Breivik por la matanza de 77 personas el año pasado recusó a un juez el martes después de que colgara un comentario en una página de Facebook diciendo que el procesado debería enfrentarse a la pena de muerte.

El juicio contra Breivik comenzó el lunes, con dos magistrados profesionales que presiden el proceso y otros tres jueces elegidos de la sociedad civil.

Después de la matanza del pasado julio, el juez 'civil' Thomas Indreboe publicó "la pena de muerte es el único resultado justo de este caso" en una página de Facebook.

No se espera que su marcha lleve a una anulación del veredicto del juicio, en el que está previsto que Breivik suba al estrado por primera vez hoy martes. El acusado se ha declarado no culpable, diciendo que actuó en defensa de Noruega y contra el multiculturalismo.