FACUA Sevilla lamenta la nefasta e insensible actuación del Ayuntamiento de Sevilla en una reclamación por la pérdida de un difunto en el Cementerio de San Fernando de la capital hispalense, tras exhumar en 2011 por error los restos de un nicho.
Tras la reclamación emprendida por FACUA Sevilla en representación de la familia afectada, el Ayuntamiento se negó a indemnizarles con el ridículo argumento de que no tenía "cobertura presupuestaria" para ello, por lo que los afectados se han visto obligados a acudir a los tribunales.
La asociación recuerda que el consistorio, como parte demandada, puede resolver esta situación en cualquier momento, sin necesidad de tener a una familia esperando un largo proceso judicial que ha emprendido a través de un recurso contencioso-administrativa.
Manuel B.S., socio de FACUA Sevilla, acudió el 1 de noviembre de 2011, día de todos los santos, a visitar la tumba de su madre en el cementerio de San Fernando de Sevilla. Al llegar allí se llevó la amarga sorpresa de que el nicho estaba vacío, pese a tener toda la documentación en regla.
La familia había renovado la cesión temporal de la sepultura hasta el 26 de noviembre de 2012. Sorprendido consultó con la propia administración del cementerio, donde le indicaron que el cuerpo había sido exhumado, sin previo aviso ni consentimiento, por error. Además, el cementerio había perdido sus restos, impidiendo así cumplir con la voluntad de la propia fallecida de descansar junto a su difunto esposo.
Angustiado por la situación, Manuel se dirigió a FACUA Sevilla desde donde se reclamó en nombre de su familia al Ayuntamiento de Sevilla, del que depende el cementerio de la capital, por responsabilidad patrimonial. Poco después el Consistorio abrió expediente para depurar la responsabilidad patrimonial y conocer lo ocurrido.
En enero de 2013, y ante la lentitud de la administración, FACUA Sevilla interpuso una nueva reclamación, pues tras más de un año no se había emitido resolución alguna.
Finalmente, en septiembre de 2013 el Servicio de Cementerio de la Dirección General de Régimen Interior del Ayuntamiento reconoció en un escrito que "tras una investigación, teniendo en cuenta que los restos de (...), se concluyó que debía haber sido exhumada por error en algún momento entre el 4 de junio de 2010, fecha en que se aprobaron varias exhumaciones de oficio en esa misma calle y el 31 de octubre de 2011, momento en que el solicitante descubría la falta de los restos".
En la carta remitida a FACUA Sevilla por el organismo municipal se añadía que desde junio de 2012 "no se realizan más actuaciones al no estar asegurada la cobertura presupuestaria para una resolución favorable a los interesados. Actualmente el expediente se encuentra en estado de caducidad".
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