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El Ayuntamiento de Madrid asumirá la limpieza si no hay acuerdo en 48 horas

miércoles 22 de octubre de 2014, 11:21h
La alcaldesa endurece su postura frente al conflicto.
La alcaldesa endurece su postura frente al conflicto.

Amenaza con llevar a la Fiscalía la situación creada por esta "huelga salvaje" y concederá a la empresa Tragsa la recogida mientras dure el conflicto. Ultimátum de 48 horas de Botella para acabar con la huelga - El Ayuntamiento de Madrid se ha cansado de esperar a que las empresas concesionarias del servicio de limpieza pacten con los sindicatos.

La huelga de limpieza de Madrid comienza a vislumbrar un nuevo horizonte. Con las posiciones enrocadas y las conversaciones encalladas, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha dado orden de contratar los servicios de la empresa pública Tracsa para hacerse cargo de los servicios mínimos. La regidora ha dado un ultimátum de 48 horas a las empresas concesionarias al estimar que los servicios mínimos establecidos para el calendario de protestas. "Pese a las labores de escolta y protección", los servicios mínimos "no se están cumpliendo" dentro de esta "huelga salvaje", ha apostillado

Botella ha tomado cartas en el asunto nueve días después de iniciarse una huelga que, hasta ahora, parecía no ir con ella. De hecho cada vez que ha sido cuestionada por ello la alcaldesa ha echado balones fuera al señalar que "los servicios están externalizados". Su postura, sin embargo, se ha ido debilitando con el paso de los días. Ni siquiera el apoyo oficial del Partido Popular ha servido para acallar las críticas recibidas tanto en la capital como fuera de España. Madrid ha pasado de querer ser capital Olímpica a ser capital de la basura en apenas dos meses.

Para neutralizar el nerviosismo por posibles riesgos para la salud, Botella ha querido enviar un mensaje tranquilizador: "Tragsa gestionará los servicios mínimos hasta que termine el conflicto laboral entre las concesionarias y los empleados", ha tranquilizado. Fuentes municipales han precisado que Tragsa no puede asumir más que los servicios mínimos, ya que rebasarlos chocaría con el derecho de huelga de los trabajadores.

Botella ha formulado este anuncio en una comparecencia con motivo de la novena jornada de huelga en el servicio de limpieza viaria y mantenimiento de jardines en el Ayuntamiento de Madrid, convocada por los sindicatos en protesta por la presentación de un ERE para algo más de 1.100 de los 6.000 trabajadores del sector.

Las concesionarias, por su parte, siguen negociando el ERE que ha originado esta huelga. La última oferta formulada a los sindicatos habla pasa por reducir el número de despidos de 1.134 a 625 trabajadores aunque estos aseguran que la única resolución posible es la eliminación del ERE en su totalidad.

Arropada por responsables municipales como el portavoz de su Gobierno, Enrique Núñez, el delegado de Medio Ambiente Diego Sanjuanbenito y su coordinador general, Juan Antonio Gómez-Angulo, entre otros, Botella ha señalado que la opción de encargar a la empresa Tragsa -participada por el Estado- no costará "ni un euro" a los madrileños.

Los servicios de Traga se mantendrían "tanto tiempo como dure el conflicto" y los gastos y costes se repercutirán, ha agregado Botella, a las concesionarias del servicio, que según Botella son las obligadas a cumplir los servicios mínimos.

Amenaza de recurso judicial

La alcaldesa de Madrid ha lanzado la advertencia de acudir a la Fiscalía argumentando que ya ha formalizado el aviso a las empresas de que no se están cumpliendo los servicios mínimos y una vez que, en su opinión, ya ha transcurrido un plazo prudencial para un acuerdo entre las tres empresas concesionarias y los trabajadores. 

Preguntada sobre la posibilidad de modificar las condiciones del contrato para marcar una plantilla mínima, ha indicado que no contempla esa opción y que la "relación laboral" existe entre las empresas y los trabajadores. Botella ha sostenido que el Ayuntamiento no conocía "ningún plan" de "ninguna" de las empresas para acometer despidos.
Los sindicatos CCOO y UGT han anunciado que barajan presentar una demanda por vulneración al derecho de huelga si la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, cumple su anuncio de contratar a la empresa pública Tragsa.

En la arena política, mientras tanto, el portavoz municipal del PSOE, Jaime Lissavetzky, ha manifestado que la alcaldesa debería dejar el cargo por su "incapacidad" de gestión en el conflicto generado.

 

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