Las declaraciones ante el juez de antiguos colaboradores ponen a Urdangarin contra las cuerdas

El tercer testigo es el empresario Miguel Zorío, quien admitió haber trucado una factura para que el yerno del Rey cobrara de la Generalitat valenciana 241.000 euros.

El apoderado confirma que Urdangarin siguió a pesar del Rey
Sorribas confesó al juez Castro que tras el veto del Rey a sus negocios privados, en marzo de 2006, el duque de Palma siguió dirigiendo proyectos del del estilo de los desarrollados en el Instituto Nóos a través de otras fundaciones, Areté y Fundación Deporte Cultura e Integración Social (FDCIS), con las que trabajó para las iniciativas de los Juegos Europeos de Valencia y del plan olímpico Madrid 2016, informa El País.

Contrataciones falsas en Aizoon
El apoderado de Aizonn confirmó al juez que la empresa Aizoon, que comparten los duques de Palma, no contaba con ningún empleado real. Urdangarin declaró lo contrario para justificar sus servicios de consejero facturadas a través de esta firma y que no declaró en el IRPF como rendimiento de trabajo personal. El duque de Palma dio de alta a trabajadores domésticos de su casa particular, a estudiantes y familiares de su secretaria para engañar, presuntamente, al fisco.

El testaferro Cockx confirma la cuenta suiza para el cobro de 375.000 euros
Por su parte, Robert Cockx, admitió por primera vez ante el instructor del caso Nóos que facilitó una empresa y una cuenta en Suiza al duque para el cobro de 375.000 euros por parte de Aguas de Valencia, como comisión por el asesoramiento de proyectos internacionales desde el Mar Muerto al Magreb.

Factura trucada para cobrar 241.000 euros a la Generalitat valenciana
Además de Sorribas y Cockx también declaró el empresario Miguel Zorío, quien admitió que trucó una factura de 241.000 euros para cobrar a la Generalitat valenciana unos trabajos no realizados realmente referidos al proyecto de unos Juegos Europeos.

Urdangarin le dictó lo que tenía que poner
Según Miguel Zorío, su empresa Lobby Comunicación emitió la referida factura el 31 de julio de 2006, a partir de conceptos “dictados” por el duque de Palma, a pesar de que no se ajustaban a los trabajos realizados porsteriormente.

“Urdangarin me dijo que pusiera unos conceptos determinados porque le interesaba por una cuestión contable”, declaró el empresario ante el juez José Castro y el fiscal Anticorrupción Pedro Horrach, según desvela El Mundo.

A pesar de que los Juegos Europeos nunca llegaron a celebrarse, el Instituto Nóos cobró de la Generalitat valenciana, gracias a la presentación de ésta y otras facturas, 382.000 euros.

Fuente: ElPlural.com - C.G. | 11/06/2013