En su carta de renuncia, Lerner señaló que considera que el Gobierno ha cumplido 'una primera etapa, caracterizada por la generación de confianza a los agentes económicos, sectores productivos y la sociedad en general'.
Añadió que ahora se inicia una nueva etapa que 'requiere de ajustes en la conducción general del gobierno, así como de la estrategia de la acción gubernamental y de la ejecución de una agenda que responda a los lineamientos programáticos del gobierno'.
'Con el único propósito de que usted quede en total libertad para realizar los ajustes mencionados, presento a usted mi renuncia irrevocable al cargo del Presidente del Consejo de Ministros', precisó.
Poco después, y en medio de innumerables especulaciones de la prensa, Humala designó como nuevo jefe del gabinete a Oscar Valdés Dancuart, un empresario y ex teniente coronel del Ejército que hasta hoy ocupaba el Ministerio del Interior.
Valdés se presentó posteriormente ante los periodistas para negar que el Gobierno esté afrontando una crisis interna y dijo que solo se ha producido una remodelación en el gabinete ministerial.
'No hay ninguna crisis, se está haciendo un reajuste, como siempre suele hacerse', aseguró.
El nuevo primer ministro agradeció la confianza de Humala y elogió a Lerner por 'su excelente trabajo, su comprensión y su confianza de que todo esto va a seguir caminando bien'.
Anunció, además, que la política del Gobierno 'sigue en pie' e incluso adelantó que se ha ratificado al ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, y a la ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Carolina Trivelli.
Valdés enfatizó que el régimen no ha dado un cambio 'ni a la izquierda ni a la derecha' y pidió a esperar a la jura del nuevo gabinete, que se realizará a las 20.00 hora local del domingo (01.00 GMT del lunes) para conocer los cambios en algunas carteras.
Su designación ha generado, sin embargo, reacciones divididas entre los político peruanos, ya que algunos la consideran 'positiva', pero otros señalan que puede implicar un giro hacia una posición más 'autoritaria' del Gobierno.
Esta última opinión fue compartida por el ex legislador Juan Sheput, dirigente del partido Perú Posible, del ex presidente Alejandro Toledo, quien añadió que el 'sector militarista del gobierno ha triunfado'.
El analista Alfredo Torres, de la empresa Ipsos Apoyo, también dijo que la salida de Lerner implica un cambio de posición del Ejecutivo frente al manejo de los conflictos sociales que se han desatado en el país, sobre todo en rechazo a los proyectos mineros.
'Valdés tiene una imagen de una persona bastante eficiente y manejó una cartera difícil como la del Ministerio del Interior con inteligencia. El hecho que venga del Ejército y del ministerio quiere decir que el Gobierno no va permitir más excesos', aseguró.
Una opinión diferente tuvo el parlamentario Luis Galarreta, de la conservadora Alianza por el Gran Cambio, quien declaró que Valdés 'ha mostrado una visión muy gerencial y muy organizada'.
La fujimorista Luisa María Cuculiza también dijo que el nuevo primer ministro es un 'hombre muy correcto, (que) trabajó muy bien en el Ministerio del Interior'.
El oficialista Jorge Rimarachín aseguró que su bancada aún no tiene una posición oficial sobre el tema, pero consideró que la salida de Lerner fue motivada por el conflicto generado en la región norteña de Cajamarca, cuyos pobladores se oponen a la puesta en marcha del proyecto minero Conga.
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