Camila Vallejo, la “endemoniá” (según el ínclito –y trasnochado- alcalde de Providencia)

Ayer mismo, conocíamos las torpes declaraciones de un ultraderechista alcalde que, a falta de argumentos (como en el caso de HPdA), también recurría al razonamiento infantil para descalificar a quien le sobrepasa holgadamente en juventud, frescura y pensamiento ágil aunque las dos primeras condiciones son –obviamente-, una simple cuestión de edad ya que el “guatón” Labbé debe superar largamente la sesentena.

Esta boutade del primer edil de la –posiblemente-, comuna más importante de Chile, echa por tierra todo el currículo académico de este gordo y trasnochado alcalde perteneciente a la ultraderecha chilena que, -si hacemos caso de wikipedia- tiene entre otras calificaciones, el ser profesor universitario, Máster en Teoría y Filosofía política (MA) de la Universidad Católica de América, y Diplomado en Marketing Avanzado, Gestión de Servicios y Formación Gerencial en la Universidad Adolfo Ibáñez, condiciones todas, que le permitirían sobradamente, tener un razonamiento digno de su estatura académica para contradecir o contrarrestar las ideas de Camila Vallejo a quién, -y ante la imposibilidad de descalificar por sus razones o postura política-, prefiere intentar desbancarla con un argumento tosco, barato y fundamentalmente estúpido: “Tiene cara así como media endemoniá”, como declaró a una radioemisora local.

Al añoso HPdA le preocupaba el piercing que Camila lleva en su nariz aunque declaraba su admiración por sus ojos verdes. Labbé en cambio, reacciona como un campesino socarrón e ignorante: “Tiene cara así como media endemoniá”. Es decir, el adiposo alcalde borra de un plumazo cualquier otra capacidad o condición que haya permitido a Vallejo tener el poder de convocatoria y el natural liderazgo que exhibe para  -como el mismo afirmó-, “movilizar a medio país”

Está claro (y a los hechos me remito), que la derecha y ultraderecha en este país, no tiene argumentos, razones ni capacidad política para manejar con éxito  cualquier cosa que no sea el “ordeno y mando”. Cuando una situación de agitación y descontento social transversal -como la que ahora mismo vive el país-, le supera, no sabe que hacer y entonces, salen a la palestra estos adalides nostálgicos de una época en que todo se resolvía por métodos expeditivos y que como HPdA y el ínclito Labbé, solo dicen solemnes tonterías y es que cuando no se tienen razonamientos en consonancia con la seriedad que la situación reclama, ¿Qué otra cosa puede decirse?.

Ahora  y siendo objetivos y calcando un poco el razonamiento del propio Labbé, al ver sus fotos en la prensa, yo encuentro que este hombre tiene cara como de “medio bueno p’al pencazo y el comistrajo”, pero vaya uno a saber: de repente lleva una vida monacal y de recogimiento y su aspecto y cara (gordo y vieja respectivamente), dan una imagen totalmente equivocada. ¡Vaya uno a saber! pero a mí, me recuerda al “Guatón Loyola”…...