Crece la demanda de una consulta popular para resolver la crisis en Chile

Mientras el Gobierno del presidente Sebastián Piñera informaba sobre la totalidad de detenidos durante la manifestación (273), el ruido de los enseres domésticos sacudidos por un palo o un tenedor se fue extendiendo por los principales barrios de Santiago. De acuerdo con La Tercera, "familias en su totalidad salieron a las calles para sumarse a la cacerolada".

El estruendo metálico, agrega, se ha sentido cerca del palacio presidencial "y en cada rincón" de la capital, incluso en las zonas "más acomodadas". Siete de cada diez personas apoyan la reforma de la educación que busca recuperar el carácter gratuito de la enseñanza (abolido por la dictadura de Augusto Pinochet) y, con este reclamo, acorrala a un Gobierno sorprendido por la magnitud y heterogeneidad de la protesta. De acuerdo con Camila Vallejo, la líder estudiantil, unos 500.000 chilenos se volcaron a las calles en la última movilización.

Infiltrados, encapuchados y violentos

Para el coordinador nacional de Educación 2020, Mario Waissbluth, “los estudiantes mostraron que la fuerza de sus convicciones continúa inconmovible. Pero estoy preocupado por la escalada de infiltrados, encapuchados y violentos, que no sólo ensucian la intención pacífica de los estudiantes, sino que polarizan crecientemente al país”.

El líder de Renovación Nacional (RN), el partido de Piñera, Carlos Larraín, no encontró otras palabras que "inútiles subversivos" para referirse a los estudiantes que se movilizan. El lenguaje de la dictadura de Augusto Pinochet se empieza a apoderar de algunos referentes de la derecha. Larraín al menos lo advirtió y pidió disculpas por el tono utilizado.

El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, responsabilizó no obstante a los líderes estudiantiles de no poder controlar los desmanes que provoca una minoría encapuchada. "Nos preocupa que aquellos que convocan a estas actividades no sean capaces de contener a estos grupos", dijo. La presencia de un policía infiltrado entre la manifestación que, al ser descubierto, buscó refugio, hizo recordar también los viejos métodos del régimen militar.

Pero a estas alturas, la discusión que engloba a la sociedad pasa por otros andariveles. Los estudiantes, los sindicatos y hasta el Partido Socialista, empiezan a considerar que la mejor manera de dirimir la situación es convocando a una consulta popular. De acuerdo con el portal el Mostrador, la idea es resistida por RN como la ultramontana Unión Democrática Independiente (UDI), el otro partido de la coalición gubernamental.

Uniones de hecho entre parejas tanto hetero como homosexuales

Piñera tiene, por su parte, crecientes problemas con los partidos que lo sostienen. Por primera vez desde que se recuperaron las instituciones democráticas, un presidente es dejado solo en la presentación de un proyecto de Gobierno. Ocurrió el martes con la iniciativa que busca regular las uniones de hecho entre parejas tanto hetero como homosexuales. "Debemos entender que no existe un sólo tipo de familia", dijo el mandatario.

Las autoridades de RN y UDI le habían dado la espalda. Enrique Estay, quien integra la Comisión de DDHH de la Cámara de Diputados, llegó en los hechos a desairarlo al lamentar que el Gobierno del que es parte se preocupara por "los maricones”.