Ha sido una década dominada por el portugués Cristiano Ronaldo y, sobre todo, por el argentino Lionel Messi. El delantero del FC Barcelona ha batido prácticamente todos los récords de LaLiga, y se ha llevado 5 de los últimos 10 pichichis. Este año no parece que vaya a ser una excepción. Según indica Oddschecker, que compara páginas de pronósticos, las posibilidades de que otro jugador que no sea Messi se convierta en pichichi son prácticamente nulas. Después de haber superado el récord de goles anotados en Liga, el argentino igualará esta temporada otra marca que sustenta el mítico Telmo Zarra, la de tener 6 trofeos Pichichi.
Desde que Güiza consiguiese el pichichi en la temporada 2007/08, solamente Ronaldo y Messi se han proclamado máximos goleadores de LaLiga, con la única excepción de dos temporadas en las que el trofeo se lo llevaron dos uruguayos: Diego Forlán con la camiseta del Atlético de Madrid en 2009, y Luis Suárez en su primera temporada con el Barça en 2016. Tiene mérito romper el dominio de Messi-Ronaldo, pero ni siquiera se acerca al logro de Güiza.
En la temporada 2007/08, Dani Güiza contaba ya con una carrera bastante dilatada. Procedente del Xerez CD, fue adquirido por el Mallorca, se fue al Recreativo de Huelva, y de allí al filial del Barcelona, que jugaba en Segunda B. Con el Murcia en Segunda obtuvo buenos resultados, lo que le permitió fichar por un Getafe histórico. Güiza ayudó a que los azulones superasen al Barça en las semifinales de Copa del Rey, donde remontaron un 5-2 en contra.
Llegaría entonces su histórica temporada en el Mallorca. Güiza no fue pichichi con un todopoderoso Barcelona o Real Madrid, lo fue con el RCD Mallorca. Y no es que consiguiese la nada desdeñable cifra de 27 goles, es que la consiguió sin que ninguno de ellos fuera de penalti.
En 2008 disputaría y ganaría la Eurocopa con la selección española, y a partir de ahí siguió cambiando de equipos. De Turquía a Getafe, luego Malasia y de ahí a un destino en auge como es Paraguay que entonces no era muy popular, pero que le permitía jugar en un equipo grande de Sudamérica, un reto personal del jerezano. Finalmente, Güiza volvió a casa y desde la temporada pasada juega con el Atlético Sanluqueño, donde sigue haciendo milagros. El equipo consiguió el año pasado ascender a la Segunda División B, lógico cuando cuentas con el último pichichi español entre tus filas.
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