La estación de tren de Atocha, el asilo de las tortugas abandonadas

Si coges el tren, no te dejes la tortuga

Procedentes de América, Asia y África, centenares de tortugas han ido a dar con sus caparazones de carey a la estación de trenes de Atocha, donde conviven en un pequeño estanque del jardín botánico de plantas tropicales.

Haz la prueba, si pasas por la estación de Atocha, en Madrid, acércate a imponente jardín botánico de plantas tropicales que hay en el vestíbulo, no necesitarás mucho tiempo para dar con los pequeños habitantes que éste contiene: las tortugas.

Procedentes de América, Asia y África, han ido a dar con sus caparazones a la estación, donde unas 300 conviven porque un día sus dueños decidieron abandonarlas. Y es que, muchas familias deciden hacerse con esta mascota poco problemática, pero cuando crecen ya no les agrada tanto y se deshacen de la misma sin calibrar los peligros que para la biodiversidad puede conllevar este abandono.

Según un portavoz del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) el pequeño estanque no fue diseñado para albergar vida animal sin embargo, se hacen cargo de su orfandad y las alimentan con pienso compuesto y plantas acuáticas.

ADIF ya no se plantea sacarlas del estanque, donde sus propietarios las han ido abandonando a lo largo de los años, porque considera que ya se han convertido en un "símbolo" de la estación.

Algunas de estas tortugas están en la lista de las especies protegidas en España, por lo que son entregadas al Grupo de Rehabilitación de Fauna Autóctona y su Hábitat (grefa) para que se encargue de tratarlas si están enfermas y posteriormente liberarlas en su medio.

Su vicesecretario general Fernando Garcés ha explicado que de Atocha recogen una media anual de unas 50 tortugas de las especies autóctonas Galápago leproso (Mauremys leprosa) y Galápago europeo (Emys Orbicularis).

En el último censo realizado en la estación se identificaron, entre otras especies, la Chrysemis Picta Belli y las Trachemys Scripta Scripta, más conocidas como tortugas de Florida, y clasificadas oficialmente en España como especies invasoras, lo que conlleva la prohibición de su transporte, tráfico y/o comercio.

La Trachemys, concretamente, está además incluida en la lista de las cien especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, que elabora la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Otras especies censadas en el estanque de Atocha por ADIF son la Graptemys pseudogeográfica o tortuga mapa, original de la parte baja del río Misisipí; la Pelodicus Sinensis, tortuga china de caparazón blando; y la Pelomedusa Subrufa, un galápago crestado africano, que sirve de alimento a muchas etnias africanas.

Como se ve han sido traídas a España desde muy lejos, y paradójicamente han ido a parar a una estación, la de Atocha, desde donde parten los trenes AVE, cuya velocidad máxima es de 300 kilómetros /hora. Se estima que algunas especies de tortugas puede invertir entre unos 20/50 minutos en recorrer cien metros.

Fuente: lainformacion.com - 21/07/13  

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