Cristina Cifuentes considera que el 15 M “ha perdido apoyo social” porque “se ha radicalizado”

“… aunque no quiero desacreditar a los 15M”
En ese momento, tras su conferencia en los desayunos organizados por la Agencia EFE en los que había hablado de movimientos ciudadanos, seguridad…, Cristina Cifuentes contestaba a las preguntas de los periodistas y los invitados. Y el 15M y la respuesta policial se estaba llevando buena parte del tiempo.

 “¿Cree que va a resurgir el 15M?”, le habían preguntado antes. Y ella: “Resurgimiento, no… el 15M con el paso de los años ha ido perdiendo apoyo social”. Y explicó su razonamiento: “El año pasado en la Puerta del Sol hubo más de 35.000 personas, ayer (domingo) apenas 5.000… Es lo natural, porque el 15M que surgió como un movimiento entre la gente ajeno a la política, que quería regenerar el sistema, a medida que ha pasado el tiempo se ha radicalizado, y ha perdido apoyo social”. Y la delegada volvió a recapacitar y tendió la mano, aún fuera para suavizar su ‘mala fama’ entre los grupos ciudadanos: “… aunque no quiero desacreditarlo”.

Es ‘la señora de la porra’ y es una ‘progre’ dentro del PP
En realidad, Cristina Cifuentes tiene una doble condición que queda muy patente cuando habla de manifestaciones, escraches y movimientos ciudadanos. Por un lado no puede evitar ser ‘la señora de la porra’, la jefa de la policía. Por otro, no aparece nunca citada, ni de refilón, en ni uno solo de los asuntos feos que su partido tiene que afrontar en Madrid: Gurteles, áticos… Odia la corrupción y las corruptelas, y se le nota.

Así, por un lado contesta casi irritada a las insinuaciones de excesos policiales en el control de las manifestaciones que “la policía no cerca, sino que protege el Congreso, que es donde están los que han elegido los ciudadanos”; o  ante los escraches después de advertir que respeta las decisiones de los jueces, y que no le gusta la palabra porque en el Código “no hay delito de escrache”, endurece el gesto para asegurar que “lo que hay al menos es una falta administrativa grave”, porque los que se reúnen frente a las casas de los políticos lo hacen sin avisar a la autoridad competente (en Madrid, ella).

Los corruptos son los que alejan a políticos y ciudadanos
Pero por otro no duda, y resulta creíble cien por cien, cuando dice que “es prioritario” que la ley y los tribunales actúan “con todo rigor” y rápido contra la corrupción en política, para la que pide que se practique “cirugía radical, porque esa es la única manera que tenemos de reconciliarnos los políticos con los ciudadanos y evitar que crezca la brecha que se amplía cada vez más”.

En ese mismo doble filo en el que se mueve, ‘jefa de lo policial’ que tiene bien interiorizado su cargo y su perfil de política ‘progre’ dentro del PP, Cifuentes ha abordado el resto de temas. Y así aunque explica “que jamás he hablado de restringir el derecho de reunión”, sí ha dado entender que estaría bien modularlo (varias veces ha repetido que desde que es delegada -año y medio- en Madrid se han celebrado más de 5.000 manifestaciones) y ha advertido que “no tienen cabida en el ámbito del derecho de reunión las acampadas en cualquier zona de Madrid”. O evita pronunciarse sobre el aborto, donde es mucho más liberal que la ley que mueve Ruiz Gallardón. O dice, con la boca pequeña y sentada al lado de Cospedal, estar conforme con las explicaciones que su partido ha dado sobre el asunto Bárcenas.

Fuente: ElPlural.com - F. Medina | 13/05/2013