La presidenta argentina reivindica logros de su política laboral en un acto masivo

Fernández dijo sentirse "orgullosa" de ser parte del Justicialismo, movimiento que tomó posición "en forma clara y concreta" a favor de "los intereses de los trabajadores y de los sectores más vulnerables de Argentina".
"Siento el orgullo de pertenencia y de identidad cuando veo esta multitud de trabajadores", dijo la presidenta en el estadio del club Vélez Sarsfield, en Buenos Aires, ante cerca de 60.000 personas, según los organizadores del acto.

La mandataria aseguró que "el trabajo ha vuelto a Argentina a partir de un proyecto político que cree en la necesidad de un mercado interno potente y fuerte, de trabajadores con salarios dignos".
"Todos sabemos que cuando hay buenos salarios y cuando hay un régimen de pleno empleo se fortalecen los trabajadores y el país. Algunos no comprenden en su necedad, en su miopía histórica, que no hay países grandes ni empresas poderosas si no tenemos una gran masa de trabajadores con salarios y derechos", señaló.

Fernández aseguró que su "proyecto político" logró "el mejor salario mínimo de toda América Latina", "el retorno de las convenciones colectivas de trabajo" y la formalización de medio millón de trabajadores que hace un año estaban "en negro" y fueron regularizados gracias a una moratoria.

La presidenta destacó la "fortaleza" del movimiento sindical organizado, uno de cuyos líderes es Hugo Moyano, secretario del gremio de los camioneros y jefe de la Confederación General del Trabajo (CGT), la mayor central obrera de Argentina y donde se recuesta parte del sustento político del Gobierno.