Mercedes Pinto (La laguna, Tenerife, 1883) fue una mujer a la que el maltrato de su marido acabó por dejarlo y viajar a Madrid, donde dio curso a su actividad cultural y literaria. Fue amiga de la feminista Carmen de Burgos, además de Miguel de Unamuno y de José Ortega y Gasset.
La novela “Él” se inspira en el personaje siniestro de su marido, Juan de Foronda, y abogó por el divorcio en sus conferencias. El libro tiene los siguientes apartados “Invitación al dolor”; “Él”; “Plegarias a la luz” y la conferencia “El divorcio como medida higiénica” que pronunció en la Universidad Centras de Madrid, en plena dictadura de don Miguel Primo de Rivera.
Mercedes Pinto se trasladó a Uruguay, país en el que se enraizó un tiempo, más tarde a Cuba, Chile y México donde fue enterrada bajo unos versos de Neruda; apenas si volvió a España en pocas ocasiones.
Creadora de Ateneos y Casas de Estudiantes
Mujer inquieta y consagrada a la animación de la vida cultural, estimuló la creación de ateneos y centros culturales de estudiantes, donde brillaban la literatura y las artes. Mercedes Pinto fue una mujer inquieta, luchadora a la que su propia circunstancia personal de humillación durante el matrimonio acabó por crecerla y reafirmarse. Republicana radical, hacia constatar sus filias y fobias con trazos gruesos en este campo.
La novela “Ella” la dedica a su hijo Juan Francisco, “el hijo que fue compañero de mi vida andariega y luchadora, sostén de mi espíritu, confidente de todos mis momentos, guardador de mis más íntimos secretos, y tortura taladradora y eterna de mis horas desde su desaparición, en los días cruentos de mi extraña odisea”.
Curiosamente la escritora Ana María Matute también comenzó a escribir de manera profesional e intensa, después de la separación de su marido, en tiempos en que las leyes y los jueces dejaban los hijos en manos del marido.
En suma, “El” y “Ella”, novelas singulares de la escritora canaria Mercedes Pinto, que han visto la luz y estarán presentes en las próximas ferias del libros que nos aguardan en los días que nos quedan de primavera.