En el mundo estarían el Museo del Chocolate de Colonia, Choco Story en Bélgica, Museo del Chocolate y Heindl SchokoMuseum en Viena, Chocolate Nation en Amberes, Mundo del Chocolate en Gramado, Brasil, etc.
A veces, pienso, que el ser humano es el ser-estar que todo lo que toca-percibe-siente-ve-huele-piensa lo cambia. Es decir, es no solo “panta rhe” o todo fluye, como diría el maestro Heráclito, sino que todo, el mismo, es el río y es el agua y es la tierra-piedra-cauce-árbol-paisaje.
Por tanto, el ser humano coge-recoge una entidad-realidad-producto, por ejemplo, las semillas del cacao, y las transforman-cambia, la utiliza de un modo o de otro, le añade otras esencias-substancias-entidades, y se va transformando-cambiando-reformulando...
Diríamos que el chocolate ha tenido dos grandes momentos, el chocolate en Mesoamérica, utilizado de diversas formas, antes de Colón, y el chocolate posterior a Colón, que pasó por varios estadios, pero su gran cambio es cuándo se le añadió leche y azúcar, surgiendo, diríamos las dos grandes modalidades actuales, el chocolate de tableta o chocolate de bombón sólido y, el chocolate líquido o de taza.
Cierto es, que el cacao y por consecuencia el chocolate, debe tener algunas substancias o principios químicos que agrada al sistema neurológico humano, además de la glucosa, es decir, el azúcar, además de la leche, además del cacao-manteca en sí mismo. Por lo cual, es un producto que por lo general, en algunas de sus formas o maneras de consumo, agrada, pienso a la inmensa mayoría de la población humana, de niños a ancianas, en forma de bombones o tabletas o líquido. O, incluso en el terruño de Hispania-España-Celtiberia-Ibería, en la forma combinada de chocolate líquido a la taza con churros. Es decir, dos ingredientes, populares, que para el gusto de estar tierras, podría ser considerado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad –guante que lanzo a los contertulios del vientre de la ballena de Internet-.
Desde el punto de vista psicofilosófico y psicoantropológico debemos valorar los pequeños placeres-alegrías-felicidades de la vida-existencia, es decir, aquellas que son legales y morales correctos, porque el devenir del tiempo-historia trae sus infelicidades-angustias-penas-derrotas-fracasos, a unas personas de un tipo y a otras de otro.
Todo el anterior párrafo para indicar, que una degustación del chocolate, en alguna de sus formas o maneras, prudente y racional y mesurada pienso que es bueno, para afrontar la vida, cada uno con sus fardos de alegrías y penas, de desánimo y desaliento, cada uno con sus circunstancias y su ciudad.
Quizás, un uso más prudente de la razón-entendimiento, pero también del cuerpo-carne, de la psique-mente, sería ser conscientes, que cada soplo de aire y vida que atraviesa nuestro ser-estar, que cada bocanada de vida, seamos conscientes del gran misterio y enigma y alegría de la vida-existencia. Es decir, en lenguaje más simplificado, que no nos comamos cinco trozos de chocolate en cinco minutos, sino quizás uno o dos, degustándolo y disfrutándolos y alegrándonos que la vida-existencia nos ha permitido, quizás en un día ajetreado, una pequeña nota en la sinfonía de cada mundo, de cada ser humano en sus circunstancias-quehaceres... ¡Que este pequeño y modesto producto, junto con otros, nos ayuden a sonreír y alegrarnos de y en la vida…!
En tiempos difíciles como los que estamos atravesando, aunque todos los tiempos han sido difíciles y felices, o felices y difíciles, me atrevería a sugerir, que quizás, para incentivar el comercio y el turismo y el turismo cultural, en definitiva, la economía y el empleo a nivel local y comarcal y regional y nacional, que estos diversos museos del chocolate que existen en la Piel de Toro, podrían crear una Red de Museos del Chocolate de la Península Ibérica.
Que todos y cada uno tuviesen en Wikipedia una entrada. Que podrían crear sinergías entre ellos, que podrían todos los museos de gastronomía y de alimentos de este territorio crear una Red de Museos de Gastronomía y Alimentos. Crear Museos Virtuales del chocolate y de otros alimentos, que en las Webs oficiales, podrían recoger textos literarios de autores de todos los tiempos en relación al chocolate…
Que podrían completar y complementar la oferta turística nacional que tanta importancia tiene para nosotros, para vivir y sobrevivir, y por tanto, ofrecer a los nacionales y extranjeros una posibilidad más de ocio cultural, de utilización de su tiempo, de valorar, en general, el chocolate en tableta o en bombones o líquido. En definitiva, de promocionar algo de la realidad llena de verdad-bondad-belleza-racionalidad-prudencia…
Ya que los bípedos racionales-irracionales que tanto se mueven-conmueven, bien harían, en alguno de esos viajes, se acerquen a ver-visitar-sentir-pensar este museo que estamos narrando o algunos de los que existan cerca de sus terruños-comarcas-provincias-regiones…
https://www.youtube.com/channel/UCP1qKD3iC1dhkOschAftOAQ © jmm caminero (08-21 abril 2021 cr).