Lo primero que tienes que tener en cuenta es que la humedad, si no se trata de forma eficiente tan pronto se observa su presencia, puede llegar a transformarse en un inconveniente bastante grave para tu hogar, oficina o local comercial. Hablamos de problemas de salud hasta otros relacionados con la infraestructura y el mantenimiento del lugar, así que mejor no dejar la solución para después.
Cómo detectar las humedades
La ventaja de las humedades es que, cuando alguna vivienda está sufriendo esta clase de fallas, suelen ser varios los síntomas que nos permiten reconocerlas inmediatamente. Basta que les prestes atención para, de esa manera, poder actuar antes de que sea demasiado tarde, minimizando secuelas.
Algunas de las consecuencias más notorias de las humedades en casa tienen que ver con la aparición de manchas gris o negras, que pueden estar acompañadas de moho. Éstas son visibles sobre cualquier tipo de superficies, pero especialmente en ambientes húmedos o poco ventilados. Probablemente, también descubras ácaros y hongos y, con ellos, un persistente mal olor.
No demasiado tiempo más tarde, se producirán los primeros deterioros en aquellas zonas de tu hogar donde las humedades hayan hecho de las suyas. Hablamos de maderas podridas, metales oxidados, pintura que se desprende, azulejos demasiado húmedos. No los pierdas de vista.
Y, como decíamos antes, de ninguna forma podemos descartar tampoco que se generen algunos cuadros de salud desmejorada, más que nada en adultos mayores, personas con alergias o trastornos respiratorios. Si estos cuadros son repentinos, chequea las humedades.
Tipos de humedades
Ahora que ya sabes por qué lloran las ventanas, es momento de intentar dilucidar qué tipos de humedades son las que tienes frente a ti. Podríamos decir que, en líneas generales, existen cuatro clases de humedades. Reconocerlas te hará más sencillo evaluar el posible tratamiento a seguir:
-
Humedades accidentales: se producen cuando se rompe algún caño o instalación y, por su localización tan manifiesta, podemos identificarlas sin perder demasiado tiempo
-
Humedades por capilaridad: se producen cuando los terrenos sobre los que se asienta la casa están demasiados húmedos, y los cimientos son antiguos o no están bien aislados
-
Humedades por condensación: se producen cuando se une una alta humedad en el ambiente, superficies demasiado frías y una pésima ventilación
-
Humedades por filtración: se producen cuando el agua que proviene del exterior de la vivienda logra abrirse camino por entre los muros o canalizaciones
Soluciones para problemas con humedades
Si bien es cierto que algunas de las respuestas más populares ante estas problemáticas son el intentar mejorar la ventilación, el utilizar productos específicos y hasta tender la ropa fuera de casa, nuestro consejo es que no pierdas tiempo y recurras a los expertos. Por ejemplo, al contactar con una empresa especializada en diagnóstico y tratamiento de humedades como es Acuasec.
Si (
No(
