Hasta esa fecha, que coincide con el final de la legislatura, los parlamentarios podrán mantener a los parientes que ya tengan contratados, informó Efe.
"Dejará de financiarse la contratación de nuevos empleados emparentados con los diputados a partir de las próximas elecciones generales"
La presidenta de la IPSA, Ruth Evans, manifestó que "dejará de financiarse la contratación de nuevos empleados emparentados con los diputados a partir de las próximas elecciones generales", previstas para mayo de 2020, según un comunicado.
"Creemos que la contratación de 'partes vinculadas' está desfasada en la práctica contractual moderna, que requiere un proceso de reclutamiento justo y abierto para promover la diversidad en el lugar de trabajo", afirma.
La contratación de parientes, de los cuales habría actualmente unos 150 en nómina, ha costado al Estado británico en torno a 21 millones de libras (24 millones de euros) entre 2010 y 2015, de acuerdo con datos del periódico The Guardian
Según este rotativo, el sueldo medio del familiar contratado es unas 5.600 libras (6.400 euros) superior que el de otros empleados, con un salario promedio de 31.350 libras anuales (36.000 euros).
En 2009, una comisión parlamentaria ya recomendó prohibir la contratación de parientes, pero los diputados se opusieron con el argumento de que sus allegados estaban dispuestos a trabajar más horas y ello contribuía a mantener una vida familiar.
La Ipsa, creada en 2010 para supervisar los gastos, ingresos y pensiones de los diputados tras un escándalo por abuso del sistema de dietas, elaboró esta normativa tras analizar entre mayo y octubre del año pasado el coste de la actividad parlamentaria.
Además del aspecto referido a la contratación de parientes, la normativa, que en su mayor parte entrará en vigor el próximo mes de abril, regula el régimen de dietas de viajes y alojamiento así como los gastos de oficina de los parlamentarios.
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