"Lo que más nos preocupa es que el nivel de la violencia crece", dijo el presidente de la policía criminal alemana (BKA), Holger Munch, en una entrevista brindada a los periódicos del grupo Frunke. "Este año, ya hubo 45 incendios criminales", aseguró.
En el 2015, durante el cual 1,1 millones de migrantes llegaron a Alemania, fueron registrados 92 incendios del tipo contra centros de acogida, frente a los 6 de 2014, de acuerdo a las estadísticas publicadas por la BKA a finales de enero.
"Los autores de estos actos criminales son en su mayoría hombres y casi el 80% de ellos vienen del lugar donde se comete el acto criminal", precisó Munch.
El presidente de la policía criminal, sin embargo, aseguró no tener conocimiento de "estructuras de extrema derecha supraregionales" que tuvieran responsabilidad de provocar los incendios.
Munch, de todas formas, alertó sobre la intensificación de la violencia verbal en internet, que en ocasiones puede convertirse en una plataforma para potenciar los actos mencionados.
En Alemania, algunos medios importantes -como la edición en línea de Spiegel -, han cerrado sus foros de discusiones en los temas relacionados con los refugiados, tras recibir una profusión de comentarios ofensivos por parte de los internautas.
Con la llegada de los flujos migratorios, el país europeo se ha visto inmerso en una inquietante espiral de violencia contra la población acogida, impulsada por la ascensión de los grupos de extrema derecha.
Durante el año pasado, varios incendios y manifestaciones racistas conmocionaron a Alemania, en especial a algunas regiones de la antigua RDA.