Los bomberos de Madrid tendrán una autoescala para llegar a una planta 16

Su compra ha sido autorizada por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento, que ha aprobado un gasto de más de dos millones para la renovación de la flota del cuerpo de Bomberos con cinco nuevos vehículos.

Con ese presupuesto se van a adquirir: un vehículo de rescate ligero RF 11, (228.134,70 euros); dos autobombas urbanas pesadas, (671.477,66 euros); una autoescalera automática de 54 metros, (1.030.000 euros), y una autoescalera automática de 32 metros, (154.686,28 euros).

Según ha informado Ayuntamiento, se trata de vehículos de enorme complejidad tanto en sus aspectos mecánicos como tecnológicos y suponen un avance cualitativo con respecto a los actuales vehículos del servicio de extinción de incendios del Ayuntamiento de Madrid.

El diseño recoge avances en dos frentes distintos aunque complementarios: una mayor eficacia y efectividad en la respuesta a los incendios y una mejor ergonomía para los bomberos usuarios.

Los vehículos se entregan equipados con el material más moderno del mercado, cumplen con la normativa vigente y se ajustan a las exigencias impuestas por la propia experiencia de los Bomberos de Madrid.

Sus mejoras y novedades se encuentran en la facilidad de manejo y el aumento de medidas de seguridad en sus maniobras. El diseño del chasis y la superestructura permitirá mejorar los tiempos de respuesta, al adaptarse mejor al entorno urbano.

Además de la autoescalera automática de 54 metros, la autoescala de 32 metros, que es de uso más frecuente en el entorno urbano, incorpora una cesta montada de forma permanente que se despliega automáticamente al empezar a trabajar y sobre la que se puede montar una camilla para evacuar heridos.

Por su parte, las autobombas tienen una potencia de 275 caballos con caja de cambios automática que garantiza una reducción de averías, así como un rápido y sencillo manejo.

Los asientos tienen integrado el equipo de respiración autónomo de manera que, cuando los bomberos llegan al siniestro, pueden salir del vehículo completamente equipados.

Cuentan además con un cabestrante eléctrico que se utilizará sobre todo en rescates y una cámara de control de marcha atrás.

Las cinco adquisiciones se sumarán a una flota de más de 200 vehículos que, año tras año, se está modernizando, para cumplir el compromiso adquirido con toda la ciudadanía.