Durante 2011 la Laguna de Meco sigue incrementando notablemente su número de especies

La Laguna de Meco se sitúa en pleno corredor del Henares. Debido a la extracción de tierras para las obras de la R-2 y el desarrollo de los polígonos industriales contiguos, se dieron las condiciones para que la vegetación colonizase la zona, conformando así numerosos hábitats para la fauna: carrizal, tarayal, choperas y saucedas incipientes, charcas temporales, playas, y zonas de aguas libres.
En conjunto la Laguna de Meco ocupa alrededor de 70 hectáreas que sirven de refugio a multitud de especies, el 70% de ellas amenazadas. Hasta la actualidad la Cátedra de Medio Ambiente ha inventariado 157 especies de aves, 10 de mamíferos, 3 de reptiles, 3 de anfibios y 22 de mariposas diurnas. Estas cifras implican que la zona sea considerada como uno de los puntos con mayor biodiversidad en relación a su reducido espacio de todo el centro peninsular.
Entre las especies más importantes destacan las aves acuáticas. Dentro de este grupo, aparecen aves gravemente amenazadas como la Cigüeña Negra, que aparece durante las migraciones, o el Porrón Pardo, un pato amenazado a nivel mundial.
La especie más característica es el Fumarel Cariblanco, ya que la Laguna de Meco constituye el único núcleo de cría para todo Madrid, situándose las colonias de reproducción más cercanas en los humedales manchegos. Durante 2011 aumentó la población reproductora un 89%, pasando de 9 a 17 parejas, respecto al año anterior.
Otra especie destacable es el Zampullín Cuellinegro, el cual ha incrementado su población en más de un 567% respecto a 2010, pasando de 3 a 20 parejas reproductoras. Esta población supone el núcleo de cría más importante de la Comunidad de Madrid.
Un grupo de aves muy destacable es el de los limícolas. Este grupo de aves típicas de regiones costeras, cuenta en la Laguna de Meco con unas 22 especies, lo que sitúa a la zona como el punto de parada migratorio mas importante de la región. Alguna de ellas, como el Falaropo Picofino, constituye una auténtica rareza a nivel peninsular.
A lo largo de la existencia de la Laguna de Meco, se han marcado para su estudio más de 1000 ejemplares de aves de más de 50 especies diferentes. Esto permite conocer sus rutas migratorias, y datos de interés como que la zona acoge más de 5.000 ejemplares de Avión Zapador en verano, o una de las poblaciones invernantes más importantes de Escribano Palustre del corredor del Henares.
Por todos estos valores naturales, durante estos últimos años la Laguna de Meco se ha constituido como un enclave de referencia para observación de aves, así ornitólogos, naturalistas, senderistas, ciclistas, etc. la visitan frecuentemente.
Sin embargo, aunque muchas de las especies que alberga están protegidas legalmente por su situación de amenaza, el futuro de la Laguna de Meco es incierto, ya que carece de protección legal y tiene proyectada un polígono industrial sobre ella.