De momento, el ministro solamente ha confirmado la muerte de once guerrilleros del Frente 33 de las FARC en el marco de los combates efectuados en una zona rural del municipio de Sardinata, departamento Norte de Santander.
No obstante, ha matizado que podrían ser hasta una treintena, ya que se sospecha que varios de ellos podrían haber quedado sepultados por el alud que ha provocado el bombardeo de la Fuerza Aérea.
"Hemos actuado en tres sitios y hasta ahora este es el balance del primer sitio. En las próximas horas tendremos información sobre el desarrollo de las otras operaciones", ha explicado Pinzón a Caracol Radio.
Las fuerzas de seguridad consiguieron localizar el refugio de los guerrilleros gracias a los vuelos efectuados sobre la zona por agentes de Inteligencia, según los cuales el Frente 33 de las FARC planeaba varios atentados en esta región.
En este despliegue han participado 150 efectivos de Policía Nacional, Ejército y Fuerza Aérea, que ha aportado 15 aeronaves, de las cuales dos han sido alcanzadas por los disparos de los guerrilleros.
Este operativo se ha llevado a cabo horas después de que siete uniformados --dos oficiales y cinco soldados-- murieran al explotar un artefacto supuestamente colocado por guerrilleros de las FARC al paso de su convoy por el sector de Guachené, en el municipio de Caloto, departamento de Cauca (suroeste).
Además, en el municipio de Suárez, ubicado en este mismo departamento, ha muerto un soldado al recibir el disparo de un francotirador mientras custodiaba las instalaciones de la hidroeléctrica La Salvajina.
En este contexto, Pinzón ha reiterado la intención del Gobierno de aumentar la presión sobre los grupos armados ilegales que operan en el país. "Vamos a seguir actuando con total contundencia. No habrá descanso de la Fuerza Pública", ha garantizado.
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