Los viajes artísticos y Fotográficos de Graciela Roger (Buenos Aires) se espacian cada año por Oriente u Occidente, emulando a los antiguos viajeros del Gran Tour, y si nos remontamos -salvando distancias de estilo-, a los de los errante estudiantes goliardos de Carmina Burana en el Medioevo, si bien ella viaja, en plan erudito, con historiadora de arte porteña al lado, excelente profesora, que va guiando e ilustrando a sus alumnas. No admite amigas de alumnas en el viaje, porque no las conoce, así que todo queda realmente en “familia”.
Le pregunto por la Bienal de Venecia de este año 2024, que durará hasta noviembre próximo y la fotógrafa se limita a decir que le interesó mucho menos que la de hace dos años que también visito. Muchos opinan que esta edición ess una abusiva exhibición de obras del o sobre el colectivo LGTB, que llegó a hartar. Es un lobby que debe dosificarse y salir de sí mismo, pues el efecto es bumerang para muchos.
Ciertamente ha sido una de las críticas continuadas a la Bienal de Venecia 2024, o más bien a su comisario Adriano Pedrosa (Brasil), director artístico del Museu de Arte de São Paulo Assis Chateaubriand (MASP) primer latinoamericano en comisariar la Exposición Internacional de Arte, de la Bienal de Venecia, y de hecho, el primer [comisario] con sede en el hemisferio sur".
De hecho, esta 60 edición de la Bienal de Venecia ha sido difícil y polémica, con pabellones cerrados por la guerra de Ucrania o de Gaza, ausencia de Rusia… A la 60ª edición de la Bienal acudieron más de 300 artistas de 88 países, entre ellos Benín, Timor Oriental, Etiopía y Tanzania, que participaban por primera vez. “Me interesaron más las exposiciones satélites en torno a la Bienal, que la propia Bienal”, insite la fotógrafa
A Graciela Roger le interesó más Art Basel 24 -clausura el 22 de junio-, la «madre de todas las ferias de arte», que está presente con sus satélites cuatro veces al año en tres continentes: en marzo en Hong Kong, en junio en la sede principal de Basilea, en octubre en París y en diciembre en Miami Beach.
Pero fue sobre todo las colecciones de arte de la Fundación Beyeler las que arrobaron la contemplación de Roger. Todas sus piezas son importantes, de primera categoría, empezando por los mejores Picasso que una pueda imaginar. La Fundación Beyeler, cerca de Basilea, Suiza, es la propietaria de la colección de arte de Hildy y Ernst Beyeler, trasladada a la fundación en el año 1982. Una selección de sus fondos se expuso hace unos años en Madrid, por el Ministerio de Cultura de España.
La llegada a la Provenza del grupo viajero porteño, les llevó por distintas colecciones de arte públicas y privadas. Vincent Van Gogh marca allí la ruta con sus girasoles. La lavanda de los campos provenzanos estaba aún muy tierna. Pronto llegará a su esplendor, como ahora en los campos de Guadalajara, cercanos a Madrid. Graciela Roger.
De su estancia en Francia, Roger destacó las Fundaciones Luma en Arles, la de Vasarelly en Aix-en Prevence y, sobre todo, la Fundación Carmignac, fundación de empresa orientada sobre la gestión de una colección de arte contemporáneo, de un premio de fotoperiodismo. Fue creada en 2000 por Édouard Carmignac, presidente de la sociedad de gestión de activos Carmignac. Todas estas Fundaciones son ricas en obras de arte de primera magnitud, según Roger.
Más información
https://lamiradaactual.blogspot.com/2022/01/cronicas-argentinas-xxi.html