Caos en ciudad brasileña sin policías deja cerca de 90 muertos

El Gobierno central envió un despliegue de más de 1.000 militares a Espírito Santo en Brasil, después de que las autoridades regionales pidieran auxilio

Vitória, Brasil.- El número de muertos en la ciudad brasileña de Vitória, castigada desde hace días por una ola de delincuencia debido a una protesta policial que dejó a las calles sin patrullas, subió hoy a 90, informaron medios locales.

La situación en el estado de Espíritu Santo, en el sureste del país, seguía siendo tensa en el quinto día sin agentes de la Policía, pese al envío de las Fuerzas Armadas para patrullar las calles, informó DPA.

Sobre todo la región metropolitana de la capital del estado, Vitória, se vio castigada en los días pasados por saqueos y violentos asaltos y enfrentamientos con armas de fuego en las calles.

El número de muertos registrados desde el sábado, el día en que la Policía Militar dejó de salir a patrullar, asciende en tanto a 90, según cifras de un sindicato policial de Espírito Santo citadas por el portal "Globo".

Vitória, ubicada a unos 500 kilómetros de Río de Janeiro, seguía hoy sin servicios de transporte público. También estaban cerrados centros de salud y escuelas públicas por temor a la violencia. Cientos de militares enviados por el Gobierno central desde el lunes para restaurar el orden público patrullaban ya en las calles.

La Policía Militar de Espírito Santo está paralizada desde el sábado como parte de una protesta para reclamar un aumento salarial.

Debido a que los policías militares tienen prohibido hacer huelgas, sus esposas y otros familiares organizaron las protestas bloqueando los cuarteles para impedir que los agentes salgan.

El gobernador de Espírito Santo, Paulo Hartung, calificó hoy las paralizaciones como un "chantaje abierto". "Es como secuestrar la libertad y los derechos del ciudadano de Espírito Santo y cobrar un rescate", citó la Agencia Brasil a Hartung.

Los familiares de los policías defendieron la medida de fuerza. "Cuando a uno le recortan sus derechos y su dignidad, su única opción es algo radical", dijo Maluma Pereira Jordao Roepke, esposa de un policía militar y portavoz de los manifestantes.

Los agentes reclaman un reajuste salarial pendiente desde hace siete años, explicó. "Las familias quieren un acuerdo con el Gobierno", aseguró Jordao Roepke. Ambas partes tienen previsto reunirse el viernes para intentar resolver la situación, agregó.

El Gobierno central anunció el lunes el despliegue de más de 1.000 militares en Espírito Santo, después de que las autoridades regionales pidieron auxilio. A la región fueron enviados desde otros estados también unos 200 efectivos de la Fuerza Nacional, una tropa militar mixta para situaciones de emergencia.