El presidente francés François Hollande dialogó este martes telefónicamente con el papa Francisco tras el asesinato de un sacerdote en una iglesia de la localidad de Saint-Étienne-du-Rouvray, y le prometió hacer todo lo posible por proteger a las iglesias de Francia.
Cuando un sacerdote es atacado toda Francia resulta herida, dijo Hollande al papa, según divulgó oficialmente hoy el Palacio del Elíseo. "Y en estas dolorosas y desalentadoras circunstancias, expresó su deseo de que el espíritu de armonía prevalezca sobre el odio", agregó el comunicado, citó DPA.
El secretario general de la Conferencia Episcopal francesa, Olivier Ribadeau Dumas, advirtió sobre el peligro de una represalia y dijo que todos los franceses y católicos del país se encontraban en shock por estos "bárbaros e incomprensibles" crímenes.
"Pero ni el odio ni la revancha son una salida", dijo Dumas en Cracovia, Polonia, donde se celebra el Día Mundial de la Juventud.