“Cuarenta años no es nada…”

La fascinante historia de Cambio 16 queda “marxianamente”resumida en la frase de su fundador Juan Tomas de Salas a la redacción durante una de las ultimas crisis, ya en los años noventa: “Os he llevado de la nada a la ruina”. Todo lo que queda en medio, desde su fundación en 1971 como revista de información económica, hasta los últimos suspiros, es el objeto de este libro de Gonzalo San Segundo redactor de economía, Jefe de Nacional y de investigación y Redactor Jefe del semanario, fruto de una extensa, apasionada y detallada exploración por el mundo del periodismo y la política durante tres décadas.

El libro se ha convertido ya, inevitablemente, en una referencia a la que tendrán que acudir los que quieran conocer la evolución del periodismo desde el tardo franquismo al primer gobierno del Partido Popular.

La personalidad de Salas fue determinante en la configuración del semanario. “Transito” por el, FELIPE, ataco’ a Suárez, defendió a González y terminó en el proyecto reformista de la fracasada Operación Roca. Influido por el último con el que hablaba y siempre por su mujer, Jefe de documentación y Comisario político en la redacción, fue capaz de impulsar un nuevo lenguaje, rápido, ágil, irónico, con columnas dictadas, titulares con doble sentido y portadas llamativas. También logró convencer a quince personas en situaciones diversas y de ideas políticas diferentes para que pusieran dinero en un proyecto que carecía de plan de negocio y de garantías de continuidad. Algunos como el Presidente, el Vicepresidente y el Secretario del Consejo de Administración procedían del propio Ministerio de Información y Turismo al que había que llevar al límite cada semana para poder vender la revista, aunque sin poder evitar el secuestro en diversas ocasiones. La salida a la calle, en noviembre de 1971, cinco años antes que El País de una publicación en español a ejemplo de The Economist pasó sin pena ni gloria.

La transformación de publicación económica a revista de información general, es decir a publicación política, más en el estilo de Time, tras la consiguiente autorización administrativa, antes de la muerte de Franco junto con la incorporación a la redacción de Pepe Oneto, y su posterior paso a la dirección , inician esa época de esplendor mencionada al principio y que duraría diez años. La marcha de Oneto, el ascenso al poder en el grupo, que incluía a Diario 16, de Pedro J. Ramírez, la retirada de algunos de los principales accionistas, la aparición de competidores, el despegue de El País y el posicionamiento político del grupo, muestran el inicio del desgaste que destrozaría a la publicación y la pondría en manos de los bancos primero y de un denostado empresario llamado Domínguez después que la llevaría al final de la aventura.

En esos años se crea la más influyente escuela de periodismo de las últimas generaciones que utiliza un lenguaje con los adjetivos imprescindibles, al estilo del de las agencias de noticias de donde procedían varios de los principales redactores. De ella salieron multitud de nombres ilustres del periodismo, muchos de los cuales siguen batallando desde distintas publicaciones y que sería muy largo enumerar. Destaca también el autor el papel de los sudamericanos, argentinos y colombianos. Los colaboradores eran exquisitos; algunos de ellos ocuparon altísimas posiciones en el primer gobierno del PSOE.

Cambio 16 ofreció también un modelo a los numerosos seguidores de esa forma de hacer periodismo y a las variadas publicaciones semanales que surgieron en los años setenta y a comienzos de los ochenta, frecuentemente dirigidas por periodistas provenientes de la, entonces, revista política por excelencia.

Hay que confiar en que en la segunda edición se supriman algunas entrevistas que poco aportan, se eliminen repeticiones y se corrijan pequeños errores como que Entursa , la empresa del INI que presidía Adolfo Suárez en 1970, era la empresa pública de los paradores nacionales de turismo.

(*) Ignacio Vasallo - Destacado profesional del sector turístico en España. Ex Director de la Oficina Española de Turismo. Fundador y primer Director General de Turespaña. Ha sido consejero de Turismo en Estocolmo, Nueva York, Milán, Londres y Paris.