Escribir te perpetúa... ¡Inténtalo!

"Shaolín"

PENSAMIENTOS

Por Verónica Ruiz Andreani. (Santiago - Chile)

Miércoles 22 de octubre de 2014

El maestro nos habla de lo importante que es acallar la mente antes de la práctica de las artes marciales. Estamos en la sala de clase tratando de practicar kung fu.



Las paredes blancas soportan un par de cuadros de animales, un tigre, una grulla, en otra hay una foto del templo Shaolin y la de un monje de pelo y larga barba gris sosteniendo una ballesta. A un costado, un perchero, y embutidos en una especie de armazón de metal, unos palos de bambú y unas armas blancas, las que, de seguro, sirven a los más avanzados.

El profesor es mi amigo y vecino. Me convidó a probar una de sus clases.

Hace frío aquí en la sala y el olor a sándalo lo impregna todo. Los alumnos son bastantes ñurdos diré. Hacen preguntas y comentarios tontos, chistes demasiado fomes, se quejan de nada, de que les duele esto y lo de más allá y están empezando a irritarme.

 

Hay uno delante de mí que está colmándome la paciencia. Interrumpió la clase para decir que no puede dejar de pensar y preguntar, odioso, frustrado, con insistencia, cómo se hace eso de no pensar en nada. Dice que trata pero que no puede, que no le resulta, casi lo grita, y el profesor, todo apacible parado allí adelante, intenta dar con la respuesta satisfactoria capaz de iluminar el inútil cráneo, y yo, con un sable a escasos centímetros de mí, creo haber encontrado la respuesta perfecta.