La justicia chilena ordenó hoy prisión preventiva para el cura Orlando Rogel Pinuer, tras ser formalizado (procesado) por abuso sexual en contra de dos menores, mientras se investigan otras diez presuntas denuncias.
Fuentes judiciales consultadas por Efe, señalaron que Rogel Pinuer, expárroco de la Iglesia San Antonio en Toltén, en el sur de Chile, fue declarado "un peligro para la sociedad" por las conductas pederastas de que se le acusan.
La Fiscalía de Temuco, a 675 kilómetros al sur de Santiago, lo indaga por ilícito de violación y será llevado nuevamente ante el juez, cuando finalicen las investigaciones para saber si las víctimas ascenderían a más de una decena.
La jueza Alejandra García dio un plazo de investigación de cuatro meses, período en que la fiscalía debe contactar a una serie de jóvenes que podrían haber participado de fiestas que ofrecía el sacerdote donde el común denominador era el sexo, según las fuentes consultadas.
En tanto, la Iglesia católica informó que el obispo de Villarrica, Francisco Stegmeier, inició una investigación canónica contra Rogel.
Stegmeier recalcó "la clara posición de rechazo a todo tipo de abuso de menores, lo que resulta especialmente grave cuando aparecen inculpadas personas que han consagrado su vida al Señor".