Los dos grandes partidos de nuestro panorama político parecen no coincidir en el uso que cada uno de ellos hace de Twitter. Mientras el PP sigue a casi todos sus rivales y a sus respectivos líderes, el PSOE sólo está pendiente de los suyos.
El PP es el gran espía del panorama político en Twitter, pues sigue a prácticamente todos los partidos y en particular a sus principales rivales y líderes del PSOE, mientras los socialistas tienen una estrategia radicalmente distinta: en esta red sólo se preocupan de lo que dicen los suyos.
A pocos días del inicio de la campaña electoral, los mensajes políticos se mueven a sus anchas por Twitter, gracias sobre todo al afán informativo y crítico de muchos de los usuarios, que cuelgan enlaces con noticias y declaraciones de los partidos y sus dirigentes.
Mientras, los "twitter" oficiales de las formaciones políticas y los candidatos, con eso de que estamos en precampaña, se contienen algo más, se limitan a informar sobre sus actos y aparcan por un rato los eslóganes.
Pero para una buena parte del mundo político, Twitter ha dejado de ser sólo un escaparate: es un instrumento más que útil para observar lo que dicen -o dicen que hacen- los demás.
Algo de lo que se aprovecha sobre todo el PP, como muestra la larga lista de partidos, candidatos y líderes de otras formaciones a los que sigue.
El twitter oficial de los populares sigue a casi 1.200 personas y organizaciones, entre las que se encuentran el propio PSOE y cerca de una veintena de los "twitteros" socialistas más activos, como el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, la portavoz del Comité Electoral, Elena Valenciano, y el presidente de la FEMP y alcalde de Getafe, Pedro Castro.
Génova, además, está al tanto también de lo que cuentan y comentan el lehendakari, Patxi López, o el candidato a la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, y también mira lo que escribe el PSOE andaluz, en este momento de tanta polémica sobre los ERE irregulares.
La lista no se acaba ahí y en el PP se mantienen pendientes de los "twitter" del Gobierno, ya que siguen a Moncloa y a los dos departamentos que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba, la Vicepresidencia Primera y el Ministerio del Interior.
Los socialistas, por el contrario, son mucho menos cotillas con lo que hace su principal rival.
En su twitter oficial, el PSOE sigue a más sujetos que el PP -poco más de 1.500- y entre ellos no aparece ni su principal rival ni ninguno de sus líderes.
Tampoco los dirigentes socialistas en esta red parecen tentados a este "espionaje" a los populares, una actitud discreta que, en este caso sí, también practican los principales líderes del PP.
De este modo, Guillermo Fernández Vara y Elena Valenciano no se preocupan por el PP, pero tampoco se interesan por los socialistas dirigentes populares como María Dolores de Cospedal o Soraya Sáenz de Santamaría.
Alguno hay, no obstante, que mira de reojo al adversario, como el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, cuyo twitter personal -tiene otro que gestiona su equipo- sigue a Ferraz.
Una vez controlado el socialismo, al PP tampoco le faltan ganas de ver lo que dicen en esta red otros partidos.
Así, el twitter oficial de Génova está atento a UPyD, ERC, el grupo parlamentario de CiU en el Congreso o Izquierda Unida.
Pero la política vista desde los partidos no es lo único que le interesa al PSOE y al PP, que también quieren leer lo que pueda decir de ellos la prensa: ambos siguen a buena parte los principales medios de comunicación españoles y a un gran número de periodistas.
Los populares son más internacionales en este aspecto y siguen a un mayor número de medios extranjeros.