Por Segundo López Soria (*) - Miembro de FEPET
22JUN17 – MADRID.- Bodega y viñedo, aparecen protegidos por la imponente presencia de los castillos medievales de Curiel del Duero y Peñafiel en la D.O. Ribera del Duero. En Comenge se elabora Don Miguel, un estupendo tinto reserva del 2011, y se hace, exclusivamente con las uvas que rinden dos hectáreas de ladera caliza, a 870 m de altitud, del Pago de las Hontanillas.
Don Miguel Reserva 2011, es resultado del ensamblaje de tinta del país - el tempranillo ribereño – con un 10% de cabernet sauvignon. Viticultura selectiva en las fases iniciales del ciclo vegetativo en viñedo, y una cuidadosa selección del fruto (podas en verde, aclareo…), y posterior recolección manual, de no más, de un quilogramo de uva por cepa y consecuentemente rendimientos cortos; con gran concentración del fruto, y una elaboración muy cuidada (fermenta en depósitos de hormigón con las propias levaduras de la uva), y posterior crianza por espacio de unos 20 meses en barricas nuevas de madera francesa, hacen posible Don Miguel Reserva 2011.
Este tinto, sintetiza todos los atributos de excelencia que distingue a un vino importante de Ribera del Duero. Los años de crianza y maduración en botella, no le han restado carácter frutal. Es potente, pero con taninos amables y muy largo paso en boca. Su calidad no ha pasado desapercibida para las excelentes puntuaciones otorgadas por Parker, o las Guías de Vinos ABC o Peñín.
Don Miguel Reserva 2011, ha sido elaborado en honor de Miguel Comenge el paterfamilias de la saga, y padre del fundador de la bodega, que fue el autor del conocido tratado: La Vid y los Vinos Españoles. Publicado en 1942, el manual fue, y es hoy en día, un referente para alumnos de agrónomos, a la vez que para estudiosos de las disciplinas de viticultura y enología.