Opinión

Garbine Muguruza

Opinión: “Desde Gredos…”

Por Pedro José Rodríguez Iglesias (*)

Sábado 03 de septiembre de 2016

03SEP16.- Nuestra reciente campeona de Roland Garros, no solo lo es en la pista sino también en la humildad. En recientes declaraciones decía dos cosas. Que después de Roland Garros tiene porque ganarlo todo. Que entrenándose en la pista de hierba seguiría adaptándose y aprendiendo.



Estas dos posicionamientos denotan que esta con los pies en el suelo y rezuma humildad, porque por decirlo así porque aunque haya ganado Roblad Garros, la lleva a la humildad de no creerse que todo lo puede,, y refuerza su posición de humildad cuando al entrenase y competir en un torneo de Palma de hierba humildemente lo hace para tener experiencia, y además manifestando el buen estado de las pistas de hiervas, donde entrena, esos denota que aprecia también el trabajo de los demás.

Suela ser habitual que los fuera de serie, los campeones, los que destaca que son sencillos y humildes y en muchas ocasiones y los que no lo hacen, y los mediocres son orgullosos, fanfarrones y chulos.

Claro en que posee muchas cualidades, no suela alardear de ellas y más bien se muestra sencillo, natural y humilde, pero la personas con frustraciones que no sabe superarlas se suelen mostrar soberbios y altaneros.

Santa Teresa de Jesús decía que “la humildad es andar en la verdad” y podríamos decir a sensu contrario que “la soberbia es andar en la mentira”.

En moral se dice que todo pecado tiene como ingrediente, ese querer ser como dioses, aspiración de algunos es lo que le imposibilita para gestionar adecuadamente el asunto y ayuda a caer en el pecado al hombre, sin embargo el luchador que se sacrifica por alcanzar sus objetivos en la vida no entra por el camino de los soberbios.

Qué ejemplo nos da Grabine en un pueblo como el español de por si soberbio y orgulloso.

(*) Pedro José Rodríguez Iglesias es escritor