El alba se acerca con gran tristeza,
En ella se revela con gran asombro
Que un ser querido que siempre reza
Ha fallecido a manos de un ogro.
Forenses investigan el cuerpo del difunto
Cuya vida, fue arrebatada con gran prestigia,
Y que el cuerpo alguna vez feliz
Esta tieso y frío lecho cual infeliz.
La familia llora su asesinato
Y ruega para que el mal nacido,
Que por haber matado
Quedara a disposición del juzgado
Donde se dictaminara su sentencia
Por indecencia que,
Cuando se rió al ver que lo mató
Que en un acto de victoria disparó
Quedando así a plena vista
Quien fue el precursor
El muerto esta vez es el ladrón,
Y su asesino Un señor que
Siendo avaro, y habiendo tomado
Su revolver M.38 dio un tiro que
Le perforó el pulmón cuando este
Iba a robar un jarrón de gran valor
El asesino no se escapó gracias
A que un buen vecino lo denunció
Y un uniformado lo apresó
Si bien no lo consiguieron por mucho tiempo,
Los otros (familia del difunto) cuando lo vieron,
Fueron a su encuentro para terminar con su existencia