Miércoles 22 de octubre de 2014
El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) mantiene a Ecuador, Bolivia y Paraguay en su lista de países con "deficiencias estratégicas" en el control del lavado de activos, aunque reconoce las mejoras que han realizado para afrontar ese delito.
En el caso de Ecuador, el país ha hecho un compromiso político para superar esas deficiencias y ha realizado "progresos" en ese sentido, señala el comunicado difundido hoy por el GAFI.
No obstante, el Grupo ha constatado que "persisten" algunas de esas deficiencias que las autoridades ecuatorianas deberán afrontar con su plan de acción en esta materia.
Ese plan debe incluir acciones destinadas a fijar y poner en marcha procedimientos adecuados para identificar y congelar activos procedentes de actividades terroristas, confiscar fondos relacionados con el lavado de dinero y mejorar la coordinación y supervisión en el sector financiero.
Por lo que se refiere a Bolivia, el GAFI reconoce también los progresos realizados por este país para mejorar la legislación que regula el lavado de dinero aunque, al igual que en el caso de Ecuador, mantiene que "persisten ciertas deficiencias estratégicas" en ese ámbito.
"Bolivia debe continuar trabajando en la puesta en marcha de su plan de acción para afrontar esas deficiencias", según el Grupo, que añade que debe hacerlo con acciones destinadas a establecer un marco legal adecuado para identificar los fondos procedentes de actividades terroristas o crear una Unidad de Inteligencia Financiera que sea plenamente operativa y efectiva.
Similares son las recomendaciones que el Grupo dirige a Paraguay, país que también ha logrado avances destacables en este campo aunque todavía tiene que superar algunas deficiencias "estratégicas".
Para lograrlo, le recomienda establecer un procedimiento adecuado para identificar, congelar y confiscar activos terroristas, mejorar la transparencia financiera o reforzar el control de las transferencias transfronterizas.
Además de los tres países latinoamericanos, el Grupo incluye en la misma lista a otras jurisdicciones como Angola, Antigua y Barbuda, Azerbaiyán, Etiopía, Grecia, Indonesia, Kenia, Marruecos, Nepal, Nigeria, Pakistán, Qatar, Sudán, Siria, Tailandia, Trinidad y Tobago, Turquía, Turkmenistán, Ucrania o Yemen.
El GAFI, creado en 1989 por los siete países más industrializados del mundo para combatir el lavado de dinero y la financiación de organizaciones terroristas, es una organismo intergubernamental que está integrado por 33 naciones y que depende de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).