El pasado día sábado 20SEP y en su sede social de la calle Parador del Sol de Madrid, se realizó la fiesta conque tradicionalmente esta asociación cultural celebra anualmente, las Fiestas Patrias chilenas conmemorando en esta ocasión, el 204º aniversario de la declaración de independencia de aquel país sudamericano, como colonia de España.
La Asociación cultural “CasaChile de Madrid” fundada en Madrid hace más de una década por un grupo de ciudadanos chilenos residentes en Madrid, reúne en la actualidad a un nutrido grupo de latinoamericanos entre los que se incluyen chilenos, peruanos, ecuatorianos, argentinos, cubanos, hondureños, colombianos entre otros y que semanalmente, se reúnen en la sede social de la asociación para departir y estrechar relaciones compartiendo experiencias y participando en las diversas actividades culturales que realiza la agrupación y entre las que se cuentan recitales de poesía, participación en encuentros culturales organizados por otras agrupaciones similares, tertulias literarias, exposiciones diversas y también, cursos de baile y folklore latinoamericano. En el apartado de las clases de baile impartidas por el socio Alejandro Sánchez, tienen especial relevancia las clases de cueca que en esta ocasión, ofrecieron de manera impecable, Alejando Sánchez y Fabiola Castillo, como homenaje a la chilenidad en este aniversario patrio de los chilenos.
La celebración de este año contó además con la estupenda decoración del recinto con motivos chilenos a cargo de María Elena y Lucy quienes trabajaron largas horas en la confección de guirnaldas y adornos con motivos chilenos además de la decoración de la mesa en la cual los asistentes a la fiesta degustaron un típico menú chileno donde no faltó la clásica empanada chilena, las ensaladas, pollo asado y por supuesto, el infaltable “ponche de vino tinto con duraznos (melocotones)”, además del vino tinto solo, para los más “conservadores” que estiman que la empanada chilena sólo puede comerse con vino tino puro, sin agregados… de manera que todos sin excepción, disfrutaron de una excelente velada con buena comida y en medio de un ambiente festivo y de camaradería iniciada como es de rigor, con unas animadas cuecas chilenas a las que siguió variada música latinoamericana.