América

A prueba popularidad de Chávez

Chávez tendrá una auténtica pruebe de fuego en 2010
Miércoles 22 de octubre de 2014
CARACAS.-El presidente venezolano, Hugo Chávez, pondrá a prueba su enorme popularidad en el 2010, cuando deberá dar respuestas concretas a una crisis económica que se recrudeció en los últimos meses mientras se prepara para unas elecciones legislativas cruciales para su gobierno.

“Si bien Chávez conserva el poder, la gestión del gasto publico, el control de la Fuerza Armada, el apoyo popular y la aceptación internacional, el futuro no se presenta tan favorable como en años anteriores'', consideró el analista Carlos Romero.

Según el ministro venezolano de Finanzas, el Producto Interior Bruto cerrará en el 2009 con un saldo negativo del 2 por ciento, mientras la inflación rondará el 27 por ciento, la más alta de la región.

“En el 2010 se comenzarán a observar importantes contradicciones sobre la orientación de un régimen cada día más radicalizado frente a una población que reclama la bonanza registrada desde el 2003'', agregó Romero.
“Por ser un periodo electoral, Chávez va a tratar de repartir la plata que ya no tiene para mantener su popularidad. Los nuevos problemas de escasez, no sólo de productos como azúcar o café, sino de servicios como agua y electricidad van a jugar contra él en el 2010'', agregó la analista Maruja Tarre.

En 2009, el gobierno de Chávez ganó un referéndum sobre una enmienda constitucional que abre al presidente las puertas de un tercer mandato a partir del 2012.

Además, numerosas leyes que allanan el camino hacia una sociedad socialista fueron aprobadas por una Asamblea Nacional (Parlamento) dominada por el oficialismo.

Según Chávez, el reto para las legislativas de septiembre será conseguir dos tercios de los diputados, con el fin de reducir a los opositores a su mínima expresión.

“Se está construyendo una unidad indispensable en la oposición. Hay una mayoría de venezolanos que desean apoyar candidaturas que generen un equilibrio muy necesario'', consideró recientemente el alcalde de Caracas, el opositor Antonio Ledezma.

En estos días, Chávez declaró que en Venezuela ''se desatarían los mil demonios'' y se acabarían los programas sociales, financiados con las divisas del petróleo, si su “revolución'' bolivariana es derrotada.

“La gallina de los huevos de oro, que es PDVSA (la estatal Petróleos de Venezuela) está acabándose. Pese a todo, la gente, de una manera increíble, no ha perdido la esperanza en Chávez. Es un hombre tremendamente carismático'', admitió Tarre.

En el ámbito internacional, en el 2009 el presidente venezolano siguió tejiendo relaciones con países de la región gracias a iniciativas como el ALBA o la Unasur, y estrechó la cooperación con otros aliados menos tradicionales como Irán, China o Rusia.

Además, el más férreo detractor del imperialismo de la región logró un protagonismo en los grandes foros internacionales como la reciente reunión sobre el clima de Copenhague o la cumbre de la Américas donde se produjo un esperado primer encuentro con su homólogo estadounidense Barack Obama.
“A nivel internacional, mucha gente se empieza a dar cuenta de la verdadera naturaleza de Chávez, que no es un Robin Hood o un presidente de los pobres, sino una nueva forma de autoritarismo'', opinó Tarre.

De acuerdo con las encuestas, la popularidad del mandatario venezolano, que rozó el 60 por ciento en el primer trimestre, sería ahora inferior al 50 por ciento.