Opinión

La muerte de La Nación

Opinión: “Corriente Arriba”

Por Juan Carlos Vila

Miércoles 22 de octubre de 2014

El Gobierno chileno decide cerrar el histórico diario 'La Nación'



Aunque fuera anunciada, es una crónica siempre nefasta. La desaparición de una cabecera con tantos años a la espalda, siendo una voz independiente de las multinacionales de la información, a pesar de ser demasiadas veces la voz del gobierno de turno, es un hecho siempre luctuoso. Se trata de voces que se apagan, es un mostrador más que desaparece con la opinión de muchos. Pero siempre hay enemigos de la diversidad y amigos de las fobias como el Senador Larraín que se alegran con la misma facilidad que odian. La desaparación de La Nación en Chile implica un poco de muerte de la propia nación. Es el silencio y el olvido para muchas formas de expresión, una reducción en las vías posibles para informarse. En España hemos tenido muertes de cabeceras o letargos virtuales, como el reciente de Público, pero nunca tan remarcables como este de Chile. Por contra, podemos celebrar el nacimiento reciente de ElDiario.es, al que deseo una larga vida con la vitalidad que demuestra en estos momentos.