Según la Asociación de Alzheimer, el diagnóstico temprano habilita a los pacientes a planificar para un futuro, poder tomar parte del ensayo clínico de alguna droga experimental, comenzar tratamientos que podrían ayudar a mantener la independencia por un período de tiempo más largo, estar involucrados en las decisiones acerca del cuidado, el estilo de vida y los problemas financieros, y de alguna manera hacer más fácil la situación para el paciente y su familia.
La enfermedad de Alzheimer es el tipo más común de demencia visto en los ancianos. Los 10 signos de alarma más comunes son:
La pérdida de la memoria que interrumpe la vida diaria. Esto incluye olvidar información recientemente aprendida, olvidar eventos importantes, preguntar repetidamente la misma información, y depender de ayudas para la memoria.
Problemas para planificar o resolver problemas.
Dificultad para completar tareas familiares en la casa, el trabajo o el tiempo libre. Esto puede incluir perderse mientras se conduce en un área familiar o la necesidad de ayuda para utilizar el microondas, por ejemplo.
Confusión con el tiempo o el espacio.
Problemas para entender imágenes visuales y relaciones espaciales, como la distancia.
Nuevos problemas con palabras habladas o escritas. Un ejemplo típico es llamar las cosas por el nombre equivocado.
Perder cosas y la habilidad para volver sobre los pasos a razón de encontrar los objetos perdidos.
Detrimento en el juicio o la toma de decisiones.
La ausencia en el trabajo o las actividades sociales.
Cambios en la personalidad y el ánimo.