El cigarrillo electrónico ha evolucionado mucho en técnica, dejando atrás a aquellos modelos iniciales que simulaban al cigarrillo convencional, han ido aumentando en tamaño, capacidad de batería y producción de vapor, pero se siguen manteniendo modelos de todos los tamaños, para satisfacer las necesidades de todos los usuarios que se inician en el mundillo del vapeo.
¿Qué tipos de vaper podemos encontrar en el mercado?
Desde que sugieran los primeros cigarrillos electrónicos el mercado ha estado en constante evolución. En la actualidad podemos destacar tres tipos de vapers principales En primer lugar existen los vaper modelos tipo MOD o petaca, que son los más grandes, con una mayor duración de la batería y un incremento en la producción de vapor, pero tienen como inconveniente que son más pesados y voluminosos.
Un segundo tipo es el cigarrillo electrónico de tipo lápiz, de forma cilíndrica, que cuenta con menor duración de batería que los tipo MOD o petaca, pero manteniendo buena producción de vapor. Pero de manera reciente se están popularizando un tercer modelo de vaper, los modelos tipo PODs, que tienden a los inicios de los cigarrillos electrónicos donde el tamaño reducido prima, pero con una producción de vapor mucho más aceptable que aquellos antiguos modelos pequeños.
Los PODs tienen la particularidad de que son muy propicios para usar con sales de nicotina, que es un tipo de nicotina presente en la planta del tabaco que permite dosis altas de nicotina que afectan de una manera más suave en el organismo, permitiendo dosis altas de nicotina sin sensaciones molestas. Esto conduce a una eficacia más alta a la hora de dejar de fumar. Quizás te estés haciendo ahora esta pregunta, ¿cuál es el mejor vaper? A la hora de elegir es conveniente informarse bien sobre los diferentes modelos y conocer cuáles son los mejores vaper del momento.
¿Cómo funcionan los PODs?
Los cigarrillos PODs usan un cartucho con líquido que se puede inhalar mediante el uso de una boquilla. Estos cartuchos cuentan con una capacidad de 2ml según la normativa actual TPD y una resistencia en la zona inferior que permite calentar el líquido para genere el vapor necesario para su consumo. Dentro de los PODs existen modelos con cartuchos desechables y otros que no lo son.
En los primeros es necesario sustituir la resistencia cuando ya no funciona por una nueva, mientras que en los segundos tan solo es necesario cambiar la resistencia como se haría con un atomizador normal. Los PODs también cuentan con una batería de tamaño similar a un mechero o equivalente al de un dispositivo USB. De estos dispositivos es interesante destacar que cuentan con una potencia moderada, menor consumo de batería y una duración superior a la de otros vaper. Gracias a ello se está convirtiendo en el tipo de cigarrillo electrónico favorito de los vapeadores.
El uso de sal de nicotina en los PODs
Si por algo destacan los PODs frente a otros tipos de vaper es por ofrecer la posibilidad de usar sales de nicotina a los usuarios. Las sales de nicotina son un componente natural que se extrae de las hojas de tabaco y ayudan a conseguir una sensación más agradable que la de la nicotina que se encuentra en los líquidos de vapear tradicionales.
Generalmente se recomienda su uso entre aquellos vapeadores que se han iniciado en el vapeo para dejar atrás el tabaquismo convencional y que necesitan todavía una elevada dosis de nicotina sin las consecuencias desagradables, como síntomas de mareo, que se sufre con la nicotina normal en los cigarrillos electrónicos de mayor potencia. Gracias al uso de sales de nicotina se consigue una sensación de saciedad en las caladas aun siendo éstas más rápidas y con menos vapor.
Como se puede apreciar existen diferentes sistemas de vapeo entre los que los consumidores pueden elegir en la actualidad. Pero son los PODs los que están atrayendo todas las miradas gracias a la gran cantidad de personas que están logrando dejar de fumar gracias a su uso combinado con las sales de nicotina.
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