Desde mi punto fijo como voluntario del cordón de seguridad del Colegio de Profesores en la Plaza Italia, desde donde partía la marcha, estuve una hora y media viendo pasar gente, encauzándola la calzada sur mientras detrás de mí había otro cordón, pero de Carabineros (o “pacos”) fuertemente armados. Ya desde temprano en la mañana tenían aislada con vallas la explanada frente al Teatro de la Universidad de Chile. A pesar de ser una manifestación autorizada, fueron haciendo que quienes iban llegando se desplazaran a los alrededores de la estatua a Manuel Rodríguez, al inicio del Parque Bustamante. Más tarde la cantidad de gente los superó, y tuvieron que quitar las defensas para que los manifestantes fueran llenando la explanada antes vedada. El cordón de voluntarios de seguridad fue importante para ir guiando al creciente número de personas.
En la parte delantera de la Marcha se desplegó la pancarta principal, sostenida por los principales dirigentes del Magisterio y su presidente Mario Aguilar. Tras ellos iban todo tipo de banderas y pancartas, muchas del Colegio de Profesores, y muchas otras de los diferentes comunales de todo el país, desde Antofagasta a Chiloé, pasando por Putaendo, Valparaíso, Chillán, Temuco, Chonchi, La Calera, Vicuña, Canela, Coquimbo y un largo etcétera. También, por supuesto, de todas las comunas de la región metropolitana de Santiago. Además, participaron estudiantes secundarios de la ACES, agrupaciones de apoderados, universitarios de la CONFECH, feministas de la Coordinadora 8 de Marzo y muchas otras organizaciones sociales y comunitarias.
Fue una marcha verdaderamente multitudinaria: gente de todas las edades y procedencias, algunas disfrazadas y portando ingeniosas pancartas, pasaban y pasaban. En un momento muy especial se detuvieron frente al palacio de La Moneda los docentes que llevan años esperando el pago de la deuda histórica: hay algunos que incluso han fallecido esperando poder jubilarse.
La Marcha marca el cuarto día de Paro Docente Indefinido, declarado el 3 de junio ante la reiterada falta de respuestas del gobierno derechista de Sebastián Piñera y la Ministra de Educación Marcela Cubillos a las justas demandas de los profesores (para ver el detalle del petitorio: http://profesormetropolitano.cl/carta-abierta-a-las-y-los-apoderados-de-chile-por-que-para-los-profesores/).
La movilización ha tenido un seguimiento del 80% y hay 5000 establecimientos educacionales paralizados, a pesar de la invisibilidad informativa en los medios de comunicación de masas, tanto escritos como televisados.
El escenario del acto central estaba montado a la altura de la estación República, a unos 3 km. el inicio de la marcha, y habían actuado grupos como Sexual Democracia y Joe Vasconcellos. Mario Aguilar ya había saludado la histórica convocatoria y se habían recibido los saludos de las diversas organizaciones que apoyan el petitorio de los profesores, cuando llegó la represión de los Carabineros.
Lanzaron bombas lacrimógenas y mojaron indiscriminadamente a los asistentes con el carro lanza-aguas, interrumpiendo la marcha cerca del metro Los Héroes. Un final poco sorpresivo, por lo ya habitual de una represión policial que siempre es injustificable y desproporcionada.
Pero eso no pudo opacar el gran éxito de convocatoria geográfica, generacional y social que ha significado esta movilización. Esperemos que haga cambiar la actitud del gobierno y dé respuestas reales a las más que razonables demandas de los profesores.
Fuente: International Press Agency - IPA
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