Ahora esta sucediendo algo parecido pero al revés, el Sr. Sánchez se atrinchera ante los problemas y de lo que le vamos conociendo cae en la siguiente:
-Tiene una política exclusivamente de gestos, gestos con los que le apoyaron en la moción de censura, gestos con la poderosa dama de hierro, europea la Sr. Merkel, gestos de compadreo con Macrom, gestos también internos, como los que le marca la Sexta, ofreciendo la abogacía del estado a las víctimas de abusos sexuales, por tener tienen hasta gestos de sobreactuación consigo mismo, se va coger el avión en un helicóptero, se pone gafas de sol y se quita la chaqueta en el avión, le enfocan los gestos con las manos, hasta hace gestos humanitarios pero gestos al fin con la migración, que políticas y proyectos para solucionar el problema ninguno.
-Ante temas conflictivos sale con monsergas generales, con el traslado de los políticos golpistas presos del anterior gobierno de Cataluña, se les traslada porque es una opción legal, lo mismo a los vascos y añade porque se ha derrotado al terrorismo de ETA, que tendrá que ver la velocidad con el tocino, etc., etc.,
-Cuando la presión es más fuerte hace dos cosas:
-no aparece en los medios de comunicación.
-se va de paseo a UE o Portugal
Resumiendo, la inexperiencia del Sr. Sánchez ya nos costó en las dos o tres primeras decisiones que ha tomado según los medios de comunicación, unos 2.500 millones de euros, y ya nos están preparado para una subida generalizada de impuestos.
Pero lo más grandioso es que a los independentistas ya les hizo varios favores y él ni siquiera ha logrado que los de Esquerra abandonen la vía unilateral.
Toda esta exposición viene a que los españoles de a pie tenemos que soportar estas ofrendas, o hipotecas de Rajoy y de Sánchez, por ejemplo soportando que si tuviéramos que ir a la cárcel los castellanos no nos darían loe privilegios que presuntamente les dará el Gobierno de la Generalidad a Rull. Turull, y compañeros indepes, como también nos quedaremos sin que el Estado nos de los setenta y tantos mil millones de euros, por habernos gastado de mas, que suponen por catalán y año unos 2.500 €, ¡Que vacaciones nos daríamos los castellanos por ejemplo con esa pasta que se les regala a los catalanes!
(*) Pedro J. Rodríguez Iglesias es escritor.
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