Puede escuchar en los huesos ajenos
De papel negro con tinta roja,
De luz atrapada en los ojos de
Un infante, de la sangre que brota
De un instrumento o la erupción de
Una persona que al fin y al cabo
No era más que una falsa alarma
Que dejo a su paso miles de anegados
Como peces en tierra no, como
Mascaras sin dueño o el bote de
Basura con oro dentro ó un cuerpo que
En vez de órganos tiene papel y tinta
Del último que escribió. El hombre
Perdona para condenar al que nada
Hizo más que existir en sí mismo, en
La pared todos escriben y nadie se
Responsabiliza del papel verde perdido
En un bolsillo de tela o cuero conocido
Y visto una fracción de segundo antes
De percatarse de todo lo conocido
Y perdido, de las voces arrancadas
De tu eterno compañero y compañera,
Del cuerpo destruido desde adentro y
Donde los huesos captan el dolor
Infrahumano desde las nubes negras
Del amanecer y así como lo anterior,
No hay probabilidad de que algo como
La vida y la muerte tenga sentido
Para el fiel escritor…