Ginebra/Estambul. - Desde el inicio de las protestas en marzo, han muerto en Siria más de 1.100 personas, según dijo hoy en Ginebra la Alta Comisaria de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, quien también denunció que unas 10.000 personas han sido detenidas.
La comisaria dio estas cifras en base a datos de organizaciones no gubernamentales y otros observadores en el país, indicó DPA.
Tan sólo el viernes pasado, más de 50 manifestantes murieron en la ciudad de Hama. También con vistas a las acusaciones del gobierno, de que 120 miembros de las fuerzas de seguridad habían sido abatidos por grupos armados, Pillay pidió que se permita el acceso al país de un grupo de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que investigue los hechos.
En tanto, los fuertes disturbios han provocado que numerosas personas huyan a Turquía, a donde llegaron en 24 horas a la frontera en común al menos 1.050 refugiados, informa la agencia de noticias turca Anadolu.
En los días previos cientos de sirios ya cruzaron la frontera buscado refugio. Los sirios temen un ataque de represalia del presidente Bashar al Assad, después de que en la pequeña localidad rural de Yisr al-Shogur, próxima a la frontera con Turquía, muriesen más de un centenar de militares y policías.
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