Sus formaciones más impresionantes, que son las que la convierten en una cavidad única, son las llamadas 'excéntricas' y tapizan suelos, techos, paredes y otras formaciones a lo largo del recorrido. Las excéntricas, junto las caprichosas formas que adoptan estalactitas, estalagmitas, columnas, coladas y otras, constituidas por un carbonato cálcico muy puro, hacen de su recorrido una apasionante inmersión en el mundo subterráneo.
La cueva se localiza en la Sierra de Arnero, entre los municipios cántabros de Herrerías, Valdáliga y Rionansa, a unos 85 kilómetros de Santander.. El acceso se realiza desde la autovía A-8 Santander-Oviedo, con salida en Los Tánagos y está perfectamente señalizado.
Nosotros hemos vuelto a visitar El Soplao acompañando a un grupo de periodistas, que llegaron a Cantabria invitados por la Consejería de Industria y Turismo, con un programa preparativo del Año Jubilar Lebaniego, que comenzará el 16 de abril de 2023 en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana. Y no pudimos tener mejor quía que Jezabel Tazón, responsable de promoción y comercialización.
Descubierta a principios del siglo XX con motivo de la explotación de las minas de La Florida, está considerada una de las grandes maravillas geológica a nivel internacional. Además del valor geológico, la cueva conserva un excepcional patrimonio de arqueología industrial derivado de la explotación de zinc y plomo que, desde mediados del siglo XIX y hasta finales de los años 70, estuvo activa en la Sierra de Arnero.
Abierta con fines turísticos en el año 2005, el visitante accede en una recreación de tren minero, a través de la galería minera de La Isidra, hasta una estación interior. A partir de aquí, se realiza el circuito a pie por diversas galerías y salas: La Gorda, Los Fantasmas, Lacuerre, Centinelas, Ópera, etc.
Jezabel Tazón nos explica que los mineros fueron los primeros que dieron nombre a la cueva por la corriente de aire que recibieron al perforar la cavidad.
Hay 3 modalidades de visitas, la guiada o turística, la de aventura en estado natural y la minera que discurre por galerías mineras y que se llega a considerar como una vía ferrata de interior.
La visita turística de una hora de duración es apta para todo tipo de visitante porque el recorrido está adaptado para personas con movilidad reducida y cerca del 90 por ciento se puede realizar en sillas de ruedas.
La de turismo-aventura está diseñada para los más intrépidos. El Soplao ofrece una extraordinaria manera de conocer en profundidad el mundo subterráneo: una ruta de 2,5 kilómetros la que los visitantes pueden sentirse espeleólogos por un día explorando galerías en su estado natural, quedando sobrecogidos por la variedad de formaciones y por la diversidad de espacios. No se trata de un recorrido exclusivo para expertos, sino que pretende acercar la belleza del mundo subterráneo a cualquier persona con una movilidad normal.
El Soplao es, que duda cabe, uno de los principales focos de atracción turística de la comunidad de Cantabria. Y, en gran medida, ha sido y sigue siendo debido, a Francisco Javier López Marcano, actual consejero de Industria y Turismo, que apostó por este proyecto en legislaturas anteriores en las que, también, estuvo al frente de departamento de Turismo.
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