Durante las jornadas han visitado ambos museos 331 personas la mayoría de Cantabria, si bien llegaron, también, de León, Madrid, Ciudad Real y Cataluña, entre otros lugares.
El número de visitantes constituye para los responsables de la Oficina de Turismo una “auténtica satisfacción” teniendo en cuenta que son meses de escasa afluencia turística.
Uno de los grupos asistentes fue la peña “Los Segundos Jueves”, que reunió a una veintena de cántabros, y que recibieron todo tipo de informaciones de Ricardo Pons, creador de este espacio expositivo, que fue muchos años director de la empresa Textil Santanderina.
Los visitantes han podido ver una gran diversidad de materias primas tanto naturales (de origen vegetal y animal: cáñamo, yute, esparto, lino, seda, lana, algodón, eucalipto), difíciles de encontrar reunidas en un solo lugar, como las derivadas del petróleo, además de las nuevas materias primas que se obtienen de los plásticos reciclados de los océanos y de los residuos de telas que anteriormente eran incinerados. Se les ha mostrado el proceso de transformación de las materias primas hasta la obtención de las prendas. Hilados, tejidos, estampados, tintes, acabados y confección de prendas entre las cuales hay materiales de alta protección para bomberos, Altos hornos, Ejército, Servicios Forestales…
La visita hace, además, hincapié en la importancia de la protección del medio ambiente (empleo de energías limpias, tintes ecológicos, reciclado, planta depuradora, trazabilidad de los productos) y del consumo responsable orientado al mismo fin.
El Museo del traje ha aportado el conocimiento de la variedad de indumentaria regional propia de nuestra región: colores, materiales, tocados y sombreros, calzado, variedades de costa e interior.
Desde la Oficina de Turismo de Cabezón de la Sal se ha manifestado su satisfacción por el resultado de esta iniciativa, esperando que la experiencia positiva de la misma sirva de altavoz para que muchas otras personas se animen a visitar estos museos.
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