¿Sabías que la felicidad se puede observar desde el cerebro?

Pese a que la aseveración puede generar gran cantidad de reacciones, responde a los avances que se ha hecho dentro de las neurociencias.

Y es que tampoco es el primero, pues a través de experimentos de laboratorio previamente se había fijado una diferencia entre deseo y placer, que son dos estados del sistema nervioso tras observar no solo la actividad neuronal sino también el flujo de algunos neurotransmisores, especialmente el sistema opioide (que pueden ser morfina y péptidos, entre otros) y la dopamina. Incluso otras investigaciones han buscado observar cómo eran las conexiones de la corteza más avanzada del cerebro, que es la órbitofrontal, con estos dos sistemas.

A juicio del acucioso investigador Néstor Braidot, quien ha sido merecedor de una gran cantidad de reconocimientos internacionales debido al perfeccionamiento de metodologías de avanzada, esas no han sido las únicas investigaciones de ese tipo, y para ello cita la realizada por el Instituto Douglas de Montreal.

“Entre las conclusiones destaca que la felicidad fácilmente puede ser observada en el cerebro”, añadió.

El escritor argentino, que posee un vasto currículo que incluye un doctorado en Neurociencias; Máster en Economía, otros en Psicobiología del Comportamiento y en Neurociencias Cognitivas y también en Programación Neurolingüística; licenciatura en Administración de Empresas, así como en Cooperativismo, Practicioner; y postgrados en Psiconeuroinmunoendocrinología y Trainer en rediseño conductual, concluye que los momentos de felicidad no son más que estados fisiológicos del cerebro, que podemos producirlos nosotros mismos.

Incluso asevera que cuando hay infelicidad “ocurre una escasa o nula activación de los sistemas de recompensa”. Es decir, que hay bajos niveles de dopamina, así como un pobre desempeño de las funciones ejecutivas.