Coincidencias

Coincidió que un amigo tenía una carretela tiraba por un famélico caballo y justamente recogía otros trastos en el barrio donde estaba la cómoda. Al mismo tiempo mi abuela había conseguido una gran cantidad de verduras y frutas en una finca, ya que terminaba la temporada y antes que se pudriera la regalaban, lógico que el amigo de la carretela pasó por las lechugas, tomates y naranjas. Ese día todo coincidió favorablemente. Quedamos con una cómoda “nueva” nos llenamos con fruta, comimos papas durante toda la semana, a pesar de las recomendaciones de mi abuela a mi madre; - que no se coman todo, que dejen para la semana siguiente,- todo esto sin gastar nada, ya que el hombre y el caballo flaco, no nos cobraron.

Lo recordé ayer, fui por mi barrita de pan y me llamó la atención un comentario de dos simpáticas señoras; ¿Sabes que Sergio Ramos está lesionado? ¡No me digas! ¡Dios mío! ¿Fue una agresión? Respondió preocupada la otra señora, y el diálogo continuó; hablaron de un posible sustituto, de que los contrarios son asesinos, que se puede perder la liga, y lo identificaron como ¡pobrecito, Dios quiera que se recupere! es fuerte y pronto estará metiendo goles.

Con mi barra de pan en la mano me fui pensando, lo que gravitan las noticias en la gente. Desayuné y tenía hora en el consultorio y al salir, me encontré con un vecino:

-¡Hola vecino qué tal!

-Bien, pero ya sabes no podemos descuidar las pastillas, y aquí estoy.

A los pocos segundos me preguntó:

-¿Qué te parece lo de Sergio Ramos? … y hablamos durante casi diez minutos sobre el tema, aunque la verdad es que soy bastante ignorante en esa cuestión. No sé de fútbol. La doctora, por cierto muy guapa, me atendía como lo hace cada tres o cuatro meses que es cuando la visito, por las famosas revisiones de orina, sangre y ver como avanza el deterioro.

En eso estábamos cuando escuchamos un griterío, eso no es normal, casi siempre la gente se comporta bien, no usa el móvil y se saludan sin levantar la voz. La doctora salió de la consulta a ver qué sucedía y, lo que podemos imaginar: cuatro “clientes” del ambulatorio discutían acaloradamente por el asunto Sergio Ramos, pero con palabrotas y todo, los rostros colorados, las venas hinchadas y los brazos de todos haciendo una mímica perfecta. Pero no eran contrarios, todos simpatizantes del mismo club, discutían por el nombre del sustituto, querían a su preferido.

Por suerte el final fue pacífico; los atendieron y cada uno marchó al bar por un café o a continuar con la cuestión.

Me fui pensando, subí a la chabola y continuaba pensando, me serví un descafeinado con leche, tosté un pedazo de pan, y continuaba pensando. Al escuchar las noticias, mis pensamientos llegaron a su fin; ¡ya tenía la solución a los problemas de cada día, que son siempre iguales.

Comencé hablando solo; Tenemos cuatro candidatos obcecados en ser presidente del gobierno, cada uno tiene en el bolsillo un papelito con 3.854 nombres de amigos y conocidos que ya le han pedido un “trabajito” desde embajador, ministro, jefe de cualquier cosa, hasta una mesita con teléfono para una amiga “intima”

Todos, los cuatro dicen tener la razón, uno apoya la corrupción, si no lo hace se queda sin senadores ni diputados, además de perder a todos los concejales. Por ahora ya tiene 1.582 encarcelados. Otro se ve que no tiene experiencia, sus guardaespaldas llevan un cajón vacío a cada mitin, el candidato se sube y arenga a sus simpatizantes, cuando ya termina, levanta la voz para que le aplaudan, sonríe y dice: ¡a qué soy guapo! Se marcha y sus amigos trasportan el cajón a otra ciudad. Un tercer candidato dice que está contra la corrupción pero guarda silencio si le preguntan ¿por qué en los colegios se obliga a enseñar una determinada religión si el estado es laico? ¿Por qué los curas opinan sobre el aborto? Eso es cuestión de mujeres. Qué saben ellos si supuestamente solo se desnudan para ducharse. No ven a los millones de niños que diariamente mueren de hambre. Insultan a los que sexualmente piensan en forma diferente, si ellos según dicen, se las arreglan “de cualquier forma” Y el cuarto candidato, quizás el menos criticable, le gusta “joderle el carácter a los rivales políticos” yo creo que no es necesario, estoy de acuerdo en disolver las fuerzas armadas, prohibir la usura que practican los bancos, desautorizar a los jueces que sentencian quitar hogares a gente modesta. Castigar a los empresarios que no respetan las horas establecidas, que no pagan la “extra”, que hacen contratos basura y acosan a las mujeres obreras.

Es mejor conocer al enemigo, buscar sus debilidades y no gritar lo que sentimos. La derecha es malvada, traidora y golpista.

Yo pensaba todo eso hasta que llegué a una conclusión. Sergio Ramos es querido, respetado, la gente sufre si le dan una patada en el tobillo, si se tiñe el pelo igual que Messi, la gente se pone seria. Es un chaval que se deja querer. Tiene una vida discreta, nada se ventea o vende a la tele. Es un buen futbolista. Representa la selección con amor, con lucha y dedicación. No es corrupto, nadie le pide trabajo. No lleva consigo un cajón vacío, no esconde a los corruptos, no es cómplice de los curas, no le “jode” el carácter a nadie.

¿Por qué no le piden a Sergio Ramos que haga entrar en la senda de la honradez , de la dignidad, de la verdad, a los cuatro jinetes apocalípticos y mediante un plebiscito lo designamos para que forme gobierno?

Es que en los numerosos comentarios sobre “la lesión” de Sergio Ramos, no he escuchado ni una sola crítica. Sin embargo de los payasos sí. Digo payasos porque hacen reír al mundo entero. Lo triste es que el mundo, se ríe de nosotros.

(Geral Aci – Madrid)