Registros policiales en Alemania tras gran operación antiterrorista

La Policía de Sajonia confirmó en su cuenta de Twitter que las fuerzas especiales han accedido a una vivienda en el noroeste de la ciudad en la que se cree que reside un conocido del presunto terrorista, señaló Efe.

Las fuerzas de seguridad alemanas han recibido más de 80 alertas tras pedir la colaboración ciudadana para dar con el paradero de Yaber Al Bakú. La Policía alemana se incautó de "varios centenares de gramos" de explosivos en Chemnitz.

"Había indicios de contactos permanentes con el sospechoso", aseguraba a través de la red social en referencia a una de estas acciones, en la calle Clausewitz.

El objetivo principal de estos registros es tratar de encontrar más explosivos, reconoció un portavoz de la Oficina de lo Criminal (LKA) de Sajonia.

Las fuerzas de seguridad han recibido más de 80 alertas en las últimas horas tras pedir la colaboración ciudadana para dar con el paradero de Yaber Al Bakr, el sirio de 22 años al que se busca por toda Alemania desde ayer por estar confeccionando una bomba para perpetrar un ataque.

La operación para detener a Al Bakr se lanzó el sábado por la mañana, después de que la Policía de Sajonia recibiese el viernes informaciones de los servicios secretos en las que se alertaba sobre el "serio peligro" que representaba el sospechoso.

Unidades especiales irrumpieron en el domicilio del joven sirio en medio de un fuerte despliegue policial en el área de Fritz-Heckert, en el sur de Chemnitz, después de que el sospechoso abandonase el edificio.

En el registro del inmueble, la policía se incautó de "varios centenares de gramos" de explosivos "altamente explosivos" y "más peligrosos que la TNT", según Tom Bernhardt, portavoz de la LKA sajona.

El diario Bild asegura, citando fuentes de la investigación, que se trata de un kilogramo de peróxido de acetona (TATP), un material muy explosivo que se puede fabricar con componentes de fácil acceso.

Un equipo de artificieros precedió a detonar allí el material encontrado tras varias horas de preparativos, ante la imposibilidad de transportarlo, mientras cerca de un centenar de vecinos permanecían desalojadas de sus domicilios por motivos de seguridad.

Además, otras tres personas fueron detenidas a lo largo del día en Chemnitz por su relación con este joven sirio; dos junto a la estación central de tren de la ciudad y otra en el centro urbano.

Dos de ellos fueron liberados este domingo; mientras que el tercero, el inquilino oficial del apartamento en el que residía Al Bakr, está siendo aún interrogado y la Fiscalía estatal de Dresde ha pedido para él prisión preventiva.

La fiscalía le acusa de complicidad en la preparación de un ataque para poner en peligro la seguridad del Estado.

Alemania sufrió dos ataques yihadistas en julio, ambos perpetrados por solicitantes de asilo, en los que murieron los dos terroristas y veinte personas resultaron heridas.

Entró a Alemania como refugiado

Al Bakr entró hace unos meses a Alemania refugiado, confirmó este domingo una portavoz de las investigaciones del estado federado de Sajonia, en el este del país.

La Policía elevó los controles de seguridad en todo el país, especialmente en aeropuertos y estaciones de tren, acotó DPA.

Al Bakr, presuntamente vinculado a milicia terrorista Estado Islámico (EIIL, ISIS o Daesh), residía en la vivienda donde la policía halló el sábado potentes explosivos en la ciudad de Chemnitz, en el sureste del país, según informó la Oficina Criminal regional de Sajonia, en Dresde. No se sabe si está armado o lleva consigo explosivos ni tampoco se dieron detalles sobre el posible objetivo del ataque.

La Policía reconoció hoy que el sospechoso se escapó la víspera por muy poco, confirmando una información de Spiegel Online. Al parecer los policías vieron al sospechoso y lanzaron disparos de advertencia pero no pudieron detenerlo.

Durante las investigaciones antiterroristas la policía de la ciudad cerró también parcialmente la estación de tren.

En el aeropuerto de Berlín Schönefeld la operación de la policía durará al menos hasta la mañana del lunes. Allí las autoridades están deteniendo y controlando automóviles y autobuses. En los mayores aeropuertos de Frankfurt y Munich no se adoptaron medidas adicionales, pues ya rigen controles más duros desde los atentados de París y Bruselas.